OPINIÓN

CAFÉ POLÍTICO

Por

25 enero, 2019

LAS HORAS CONTADAS

Nicolas Maduro tiene las horas contadas. Ha perdido el apoyo de la comunidad internacional que cada hora que pase lo va aislando más. Si en estos días la disidencia no logra tumbarlo, sería terrible para Venezuela y los venezolanos. Hoy es el momento para proscribir la infamante y oprobiosa Revolución Bolivariana que hizo más pobres a los jodidos y más infelices a los desdichados. Maduro tiene que irse. El dictador se tambalea, mientras que la posición de México es aciaga y tenebrosa al no desconocerlo. Mal, muy mal. Amparados en el Derecho de la Libre Autodeterminación de los Pueblos, el gobierno mexicano ha manifestado que apoya el gobierno del déspota y tirano Nicolás Maduro, disque “para no interferir en la forma de gobierno de otros pueblos”, cuando México con Luis Echeverría rompió relaciones con Chile cuando la Junta Militar de Augusto Pinochet derrocó a Salvador Allende. O cuando Lázaro Cárdenas rompió con España para apoyar a los republicanos y desconocer al General Francisco Franco. Es decir, no necesariamente hay que acatar al dedillo el Derecho de la Libre Autodeterminación de los Pueblos, máxime y en virtud que en Venezuela se ha venido vulnerando, de manera constante y persistente, los derechos humanos. Solo Cuba, Bolivia, Nicaragua y México han reconocido a Maduro.

JUAN GUAIDÓ, LUZ Y ESPERANZA

Cabe destacar que la figura de Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional, emerge como faro de luz y esperanza hoy convertido en Presidente Interino de Venezuela con el apoyo de las grandes mayorías del pueblo venezolano que dicho sea de paso, en 3 días de marchas y manifestaciones en contra del dictador, han muerto 26 personas. Huelga decir que Nicolás Maduro está usurpando el poder desde que a principios de este mes se juramentó para un segundo período tras una elección totalmente burda y fraudulenta. Ahora bien, la rápida reacción de la comunidad internacional, incrementará la presión sobre el tambaleante gobierno de Maduro para lograr una transición que debe ser si no aterciopelada (imposible), si pactada. Hoy Maduro Moros pide diálogo a través de dos árbitros que serían México y Uruguay. Vamos, aquel pretendido eje Cuba-México-Venezuela, se está tambaleando, se está desmoronando. Y lo peor, como si Cuba y Venezuela fuesen dos ejemplos a seguir por nosotros. Ahora bien, este eje tendría como intención salvaguardar los acuerdos del Foro de Sao Paulo –de corriente socialista y comunista– auspiciado por Hugo Chavez, Fidel Castro, Lula da Silva, Tabaré Vázquez, Daniel Ortega, Evo Morales, entre otros. A la muerte de Fidel Castro, dicho Foro desea imponer sistemas similares al venezolano en varios países. Carajo, ya ni la burla perdonan. Por cierto, hago cita textual del que fuera primer ministro del Reino Unido, Winston Churchill: “El socialismo es la filosofía del fracaso, el credo a la ignorancia y la prédica a la envidia; su virtud inherente es la distribución igualitaria de la miseria”

PEÉSIMA DECISIÓN

La deplorable decisión del presidente Andrés Manuel López Obrador de reconocer el gobierno de Maduro, hará que México se aísle de la comunidad internacional. Recordar que 11 de 14 países del Grupo Lima; la Organización de Estados Americanos (OEA) y otros países de Europa como España y Francia, han reconocido al Presidente Interino Juan Guaidó, un ingeniero de 35 años. Ahora bien, el probable aislamiento de México es sumamente grave e indignante. Si la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en Texcoco hizo que bajaran puntos a la credibilidad de inversión y crediticia de nuestro país, ahora con mayor razón quedaremos bloqueados y reducidos ante países con los cuales México depende –en mucho– de sus exportaciones e importaciones. Para empezar con Estados Unidos, quien es el principal protagonista en la unción del nuevo gobierno que encabeza Guaidó. Insisto, los errores que en materia de política exterior ha cometido López Obrador, lo pagaremos con creces todos los mexicanos. Al tiempo.

ENRIQUE SARMIENTO SE QUEDA

Enrique Sarmiento es un líder social que trae la camiseta bien puesta de su Partido Revolucionario Institucional. El no haberse convertido en su dirigente en Torreón, no lo orillo a irse del tricolor a pesar de que le han venido coqueteando los de Morena. Por ejemplo, María Navidad de Jesús Rayas Ochoa, exdirigente del Movimiento Territorial en Zacatecas y hoy diputada local por el PRI pero conversa a Morena, le ha llamado a Enrique para darle un chisme de Ricardo Monreal, líder del Senado de la República. “Que vayas a buscarlo porque Ricardo quiere hablar contigo”, le ha insistido. Por otro lado el regidor panista de Torreón Esteban Soto Durán (leal e incondicional a Luis Salazar), le ha dicho a Enrique que su jefe LFSF quiere verlo y echar la platicada con él. Lógico es suponer que conociendo el liderazgo y capacidad de Sarmiento, Monreal y Salazar quieran llevárselo a Morena. Pero Enrique ya habló con el dirigente priista Eduardo Olmos, a quien le ratificó su lealtad al gobernador Miguel Riquelme y a su partido. Es decir, Enrique Sarmiento Álvarez, se mostró como un político inteligente, franco y leal. Un viejo lobo de mar pues.