En el mes de enero de 1923 inició sus funciones como presidente municipal de Torreón don Nazario Ortíz Garza, quien dentro de su programa de gobierno municipal, dio un primer lugar al embellecimiento de la joven ciudad, siendo su primer proyecto el del boulevard Morelos, tal y como se conoció inicialmente el Paseo Morelos. Para este efecto, se le construyó el camellón central, el cual se inició con la construcción del cordón central que contenía el prado que fue sembrado dentro de la cordonería de cemento, dando así inicio a esta gran obra.
En el mes de septiembre del año de 1925, al celebrarse la primera gran Feria del Algodón, se observaba ya en toda la ciudad el pavimento de las calles que para ese entonces existían en nuestra gran ciudad de Torreón, estando asfaltadas las mismas, por lo que se procedió a la inauguración del llamado en ese entonces “Boulevard Morelos”, procediendo la reina a conectar el switch que encendió los globos blancos que eran parte del alumbrado a lo largo de toda la avenida Morelos, sorprendiendo a la ciudadanía por no existir cableado visible por estar el mismo enterrado bajo el piso, el cual iniciaba en la primera calle del Torreón viejo y concluía en la Fuente del Pensador.
El escultor Fernando Torrielo fue contratado por don Nazario Ortíz Garza para el efecto de que modelara diversas estatuas y jarrones de ornato que fueron instalándose en las bocacalles en la mayoría de las cuales se instaló una glorieta, con un bello jarrón o una auténtica escultura, instalándose en la avenida Morelos y calle Múzquiz un gran obelisco y en la Alameda Zaragoza, en la hoy conocida como Fuente del Pensador, con una réplica exacta de la famosa escultura del gran Miguel Ángel, del mismo nombre.
Desafortunadamente, las esculturas y glorietas que se encontraban en todo lo largo de la hoy avenida Morelos, colocadas por las iniciativa del gran presidente municipal don Nazario Ortíz Garza, desaparecieron en breve tiempo, señalando algunos autores que han escrito sobre la historia de Torreón, que el pretexto fue político para desaparecer la ornamentación de la gran avenida Morelos, la que daba mucho realce al naciente centro urbano. Muchas fueron las hipótesis que se manejaron para explicar la desaparición en cita.
Desde el año de 1898 se le impuso el nombre al paseo que nos hemos venido refiriendo, juntamente con doce calles y ocho avenidas más , siendo jefe político de Torreón don Luis M. Navarrro. De igual manera, una vez pavimentada, se procedió por parte del agricultor lagunero don Plácido Vargas a plantar las palmeras que le dieron una gran presencia a la calzada Morelos.



