Investigadores de la Universidad Autónoma Agraria Antonio (UAAAN), investigan el incremento de casos que en los últimos meses se han reportado en el ejido La Tortuga del municipio de Ramos Arizpe de la enfermedad conocida como faciación o crestación, que afecta a la planta de candelilla (Euphorbia antisyphillitica), misma que es de gran importancia económica para los productores de la cera que se extrae de esa especie.
En entrevista, Miguel Ángel García Moreno, alumno de doctorado de la UAAAN, dijo que, aunque esta enfermedad, que provoca deformaciones y la muerte de la planta, se conoce desde hace muchos años, aún se desconocen las causas que la producen, y que van desde factores genéticos, mutaciones, radiación solar, plagas, microorganismos o factores ambientales.
Señaló que, aunque de manera común se han reportado casos en las diferentes comunidades cuyos habitantes se dedican a la explotación de la cera de candelilla, es de llamar la atención este aumento de casos en el ejido La Tortuga, donde dijo, de cada 30 plantas analizadas cinco presentan características de esta enfermedad.
Indicó que, aunque no hay hasta el momento un riesgo latente para las poblaciones de esta especie, es necesario conocer las causas de la enfermedad para evitar que posteriormente se presente un impacto negativo en la producción de cera de candelilla.
“Estamos investigando la candelilla, la diversidad genética y la citogenética, las diferencias que hay en las poblaciones silvestres y los cromosomas que se encuentran entre estas poblaciones. Se trata de una enfermedad que no había sido reportada anteriormente en la literatura y en ese sentido lo que estamos haciendo es ver los motivos por los que se origina esta enfermedad”, dijo García Moreno.
“Donde colectamos mayor cantidad de especímenes con la enfermedad es en Ramos Arizpe, en el ejido La Tortuga, pero también en otras localidades se han reportado casos de esta enfermedad, es necesario conocer las causas, ya que si esta enfermedad causa la muerte de la planta y los productores están haciendo una selectividad negativa y escogiendo las plantas sanas, eso puede causar un impacto negativo en las poblaciones naturales, lo que pegaría en la economía de los productores”, agregó el investigador. (ÁNGEL AGUILAR)



