Una “secta de pastores” gobierna en Piedras Negras

Las decisiones que toma el alcalde Jacobo Rodríguez se llevan constantemente al terreno espiritual, en choque con el Estado laico y con disposiciones municipales, estatales y federales, afirma el periodista Alfredo González

En su columna “A Fuego Lento”, publicada en el periódico El Heraldo de México, el periodista Alfredo González afirma que en Piedras Negras más que el alcalde, quien realmente manda es un grupo de pastores religiosos e illuminatis.

    Por considerarlo de interés para nuestros lectores, el texto de la columna completa es el siguiente:

“A un mes de cumplir su primer año, Jacobo Rodríguez ha gobernado Piedras Negras entre polémicas y escándalos, con el respaldo de su pastor y guía espiritual, Luis Campos, quien además cobra como jefe de gabinete

Jacobo Rodríguez llegó a la alcaldía prometiendo resultados; doce meses después, lo que abundan son críticas. Su “estilo” pendenciero —ataques a medios y adversarios— sustituyó a los logros. Con frecuencia, en lugar de aclarar señalamientos, agradece “a Dios” por los cuestionamientos y la “persecución” que dice padecer.

No es pose: su jefe de gabinete, Luis Campos, es también su pastor. En sesiones matutinas de trabajo, encabeza oraciones para agradecer los “ataques”, mientras presume en redes su labor como predicador.

Que Luis Campos pertenezca a una organización evangélica sería un asunto personal; el problema central es que decisiones públicas se llevan constantemente al terreno espiritual, en choque con el Estado laico y con disposiciones municipales, estatales y federales.

En el cabildo y en el propio equipo del alcalde crece la alarma. No falta quien afirme que Morena no gobierna en Piedras Negras: gobierna una “secta de pastores e illuminatis” con miras a construir la candidatura al gobierno estatal de Rodríguez.

El grupo de Campos opera bajo la marca Profetas 25; organiza “congresos” en Coahuila y Monterrey con cuotas de 300 a 500 pesos por asistente. Los pagos, señalan registros, se realizan a una cuenta de Banamex a nombre de María Luisa Rodríguez Corona, en Monterrey, Nuevo León.

Hasta hace unos días, el Instagram personal de Campos mostraba su protagonismo como orador; de un día para otro eliminó esos contenidos. En el municipio se dijo que lo hizo tras una solicitud de transparencia. Sin embargo, el sitio oficial del evento aún lo exhibe como predicador, lo mismo que cada mañana en la presidencia municipal de su discípulo y admirador: Jacobo Rodríguez.

La política requiere acciones, no dogmas; obras públicas, no colectas religiosas; rendición de cuentas y servicios municipales por encima del púlpito. Y si el alcalde aspira a algo más, la ruta pasa por transparencia, legalidad y resultados. Todo lo demás es fanatismo… y riesgo para un proyecto político sustentado en la religión.

Como señalan medios locales, la maquinaria ya está en marcha: el padre de Jacobo haría negocios a la sombra, y su pastor, Luis Campos, prepararía el “rebaño” que lo acompañará en su sueño de conseguir la gubernatura de Coahuila en 2029. ¿Y Morena? Bien, gracias.

Mientras tanto, el edil intenta construir distractores. Atribuye todo a un “golpeteo político” del PRI y del gobernador Manolo Jiménez porque, según sus dichos —a propósito de máquinas—, “todos quieren aceite y en este taller no lo van a conseguir”. (Con información de El Heraldo de México)

 

https://heraldodemexico.com.mx/opinion/2025/11/26/pastores-illuminatis-mandan-en-piedras-negras-747884.html