Invita Apoya tu Bosque Local a sumarse a esta tendencia
Por temporada, la organización civil Apoya tu Bosque Local activó nuevamente su campaña “Pinos Embajadores”, una iniciativa ecológica con la que las familias de Saltillo pueden rentar un árbol vivo en maceta para decorar sus hogares durante la Navidad y, al mismo tiempo, contribuir a la conservación del medio ambiente.
El objetivo es disminuir la tala de árboles que cada año se destinan como pinos navideños, práctica que afecta considerablemente los ecosistemas locales. Con esta alternativa, los árboles permanecen vivos y, una vez concluido el mes que suelen permanecer en casas, negocios o empresas, son devueltos al colectivo, explicó Alejandro Javier Argüelles Flores, presidente fundador de la organización. Tras su retorno, los ejemplares son plantados en diversas sierras de Coahuila, donde contribuyen a la recuperación de zonas afectadas por incendios forestales.
«Esta iniciativa se creó pensando en alternativas para tratar de evitar que a la gente se le pudiera hacer fácil ir a la montaña a talar un árbol y preservar lo que pudiera haber aquí en la región y, en el mismo sentido, el dinero que se obtiene por los árboles que se rentan se utiliza para comprar árboles que se van a utilizar en las reforestaciones que hacemos. De la misma manera, esos mismos pinos embajadores, cuando llegan a un período o un ciclo de rentas, se incorporan también a las reforestaciones», compartió este sábado, en entrevista con El Heraldo de Saltillo.
El costo de renta varía entre 400 y dos mil pesos, dependiendo la especie y el tamaño del árbol. Para conocer el proceso, requisitos y comenzar a apartar un ejemplar, las y los interesados pueden consultar la página de Facebook Apoya tu Bosque Local, donde se brinda toda la información necesaria para llevar el espíritu navideño a casa sin afectar al medio ambiente.
«Es un ganar en todos los sentidos, las familias muchas veces van y comprar un árbol a un super o tienda departamental y ya es un árbol que ya viene muerto, ya está talado y el follaje le dura alrededor de un mes o mes y medio y ese árbol empieza a decaer, a perder su coloración y luego andan viendo para tratar de ver cómo lo tiran o cómo se deshacen de él», añadió.
«Con nosotros es lo opuesto, el árbol va en una maceta, completamente vivo y promovemos mucho para que la gente plante árboles en sus casas y muchas veces la gente se encariña con el árbol y nos dicen que prefieren quedárselo y plantarlo en el árbol de la casa», concluyó. (OMAR SOTO)
