Ciudad de México.- Las lluvias torrenciales provocadas por una perturbación tropical y los remanentes de dos huracanes dejaron un saldo devastador en Veracruz, Hidalgo, Puebla, Querétaro y San Luis Potosí. Hasta el 16 de octubre, se reportan 66 personas fallecidas, 75 desaparecidas y más de 100.000 viviendas dañadas o destruidas. Unas 6000 personas permanecen en albergues temporales mientras continúan las labores de búsqueda y rescate.
Las autoridades informaron que 191 comunidades siguen incomunicadas por los daños en carreteras y las difíciles condiciones meteorológicas, sobre todo en zonas montañosas. Equipos federales y locales realizan censos para evaluar el impacto y coordinar la ayuda, en una temporada de ciclones particularmente activa en el Pacífico oriental.
La ONU en México activó su equipo de emergencia, en coordinación con el Gobierno federal, para apoyar la respuesta humanitaria y comenzar a movilizar suministros y personal en las zonas afectadas, mientras se prepara la siguiente fase de recuperación y reconstrucción. (AGENCIA ONU)



