
Washington, EU.- Dejar de fumar es un desafío considerable. Una creencia popular afirma que es una de las tareas más difíciles de la vida, y la evidencia lo confirma. Según expertos, solo el 5% de las personas que intentan dejar de fumar por su cuenta lo logran. Con asistencia médica, el porcentaje de éxito aumenta significativamente a un 60%, de acuerdo con un estudio del Ministerio de Salud de España.
En contexto, el porcentaje de personas que obtienen éxito al abandonar el consumo de alcohol es mayor siendo de un 60 por ciento mínimo según datos de la misma institución.
Por eso el primer paso para recuperarse de una adicción es abandonar el tabaco el cual descubrieron podría ser un factor decisivo en la recuperación de adicciones, según un estudio de los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de Estados Unidos, publicado en la revista JAMA Psychiatry.
Los datos muestran que quienes dejan de fumar presentan un 42 por ciento más de probabilidades de mantener una recuperación sostenida de la adicción al alcohol u otras drogas, en comparación con quienes continúan fumando.
El análisis, basado en el estudio PATH (Evaluación Poblacional del Tabaco y la Salud), incluyó a 2 mil 652 adultos estadounidenses con antecedentes de adicción al alcohol o a otras drogas.
Durante un seguimiento de cuatro años, los investigadores observaron que el cambio de estatus de fumador actual a exfumador se asociaba con una mejora significativa en la remisión de las adicciones no relacionadas con el tabaco.
Los resultados, obtenidos por el equipo de los NIH, se mantuvieron sólidos incluso tras considerar otros factores que podrían influir en la recuperación, lo que refuerza la aplicabilidad de las conclusiones a nivel nacional.
El estudio PATH, financiado por los NIH y la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, se distingue por su representatividad nacional y su enfoque longitudinal.
El vínculo entre el tabaquismo y otras adicciones ha sido objeto de investigaciones previas, que ya sugerían una relación positiva entre dejar de fumar y la mejora en la recuperación de otros trastornos por consumo de sustancias.
Sin embargo, la mayoría de esos estudios se basaban en datos de centros de tratamiento enfocados en una sola sustancia o en ensayos clínicos para dejar de fumar, lo que limita la generalización de los resultados. El análisis actual, según los NIH, supera esas limitaciones al utilizar una muestra representativa de la población adulta estadounidense.
El doctor Wilson Compton, autor principal del estudio señaló que “este hallazgo refuerza el apoyo a la inclusión del abandono del hábito de fumar como parte del tratamiento de la adicción”, una recomendación que podría transformar la atención estándar en este ámbito.
El estudio PATH, que sigue en curso, proporciona una base sólida para futuras investigaciones y para el desarrollo de políticas de salud pública más integradas.
Encontrar las estrategias más efectivas para acompañar a quienes buscan dejar el tabaco durante su tratamiento o recuperación de adicciones será clave para potenciar sus posibilidades de una recuperación duradera. (El Heraldo de Saltillo)


