El caos, la falta de infraestructura y el maltrato a los adultos mayores, por parte del gobierno federal, derivaron en un feminicidio y el suicidio de un adulto mayor.
Monclova, Coahuila.- Lo que debía ser un trámite de rutina para recibir la pensión federal, terminó en una tragedia que sacudió al centro de Monclova. La mañana de este viernes, en las inmediaciones del Banco del Bienestar, una discusión entre dos adultos mayores, que eran pareja sentimental, terminó con la mujer acuchillada mortalmente por su agresor, quien segundos después se quitó la vida.
Una tercera persona, también adulto mayor, resultó lesionada al intentar defender a la víctima, aunque se reporta fuera de peligro.
Los hechos ocurrieron frente a decenas de testigos, justo en la fila para el cobro de pensiones del gobierno federal.
En ese lugar, según relataron los testigos, el calor, la desorganización y las malas condiciones del sitio son constantes.
Los adultos mayores esperan durante horas su turno en un área improvisada con un toldo de una marca de cerveza que obstruye la vialidad del carril central, generando caos vehicular y riesgo para quienes transitan.
La víctima, una mujer de la tercera edad, recibió varias heridas con arma blanca por parte de su pareja, quien tras el ataque se suicidó.
Testigos dijeron que el conflicto inició por una discusión, pero se salió de control ante la falta de condiciones y personal capacitado en la oficina del gobierno federal.
La Policía Municipal, la Policía Estatal y la Agencia de Investigación Criminal llegaron minutos después para atender el reporte.
La autoridad local informó que trabajará en coordinación con los distintos órdenes de gobierno para esclarecer lo sucedido.
Sin embargo, más allá del hecho violento, lo que se pone nuevamente en evidencia es el trato indigno que reciben los adultos mayores por parte del gobierno federal.
“Esto no es un banco, es una tortura bajo el sol. Nos tratan como si no valiera nuestra vida”, declaró uno de los presentes.
Los adultos mayores entrevistados exigieron el cambio inmediato de sede y una atención digna. Denunciaron que el lugar no cuenta con condiciones adecuadas ni para el cobro de apoyos ni para los trámites cotidianos, y que las instalaciones improvisadas no solo los exponen al clima extremo, sino también a riesgos de seguridad y violencia. (EL HERALDO)


