Cómo lo establece la tradición, este domingo, el obispo de la Diócesis de Saltillo, monseñor Hilario González, encabezó en la Catedral de Santiago la celebración del Domingo de Ramos en este año Jubilar 2025, lo hizo en compañía de decenas de familias que llenaron el templo, justo a una semana del Domingo de resurrección de acuerdo a la Semana Santa.
Los fieles con Ramos de laurel y manzanilla en sus manos fueron partícipes de la santa misa para alabar a Jesús y recordar su entrada triunfante a Jerusalén, anterior al acceso al templo, el prelado bendijo los ramos de los asistentes.
Este año, el obispo destacó en su mensaje a través del evangelio de San Lucas que la oración, el servicio y la misericordia deben de reinar en la fidelidad hacia Jesús.
“Estamos iniciando la semana Santa y la invitación está abierta a descubrir los misterios de salvación para los cristianos con mucha devoción y piedad, sabiendo que es la fiesta más grande de nuestra fe cristiana” comentó
“Hacemos la invitación a cultivar esta unión con Jesús; él es nuestro amigo, nuestro hermano, destacando que estos tiempos de semana Santa son tiempos de familia, de amistades y de vacación; por ello, es importante también invitar a Jesús a esta vacación, él también es parte de nuestra familia” añadió.
El monseñor, Hilario González García, pidió los creyentes que aprovechen la semana santa y no caer en excesos que lleven a tragedias, pues son días para acercarse más a Dios, reflexionar y descansar.
“Para algunos de estos días representan una invitación a la fiesta a tomar alcohol en exceso, y esto puede llevar accidentes fatales y acontecimientos que no son deseables en nuestra sociedad; por eso hay que escuchar el llamado de Dios, detenernos, reflexionar y en familia, convivir pacíficamente” declaró. (EDUARDO SERNA).
