Al esperar que no se cristalice ninguna amenaza del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el secretario adjunto de la CTM, Jesús Berino Granados, dijo que ya se sienten las afectaciones en la planta General Motors, pues de tener tres turnos se ha reducido la plantilla laboral a dos y existe la expectativa de que la disminución llegue a sólo un turno de trabajo.
Comentó que la cantidad de despidos llegó a mil operarios al señalar que de 10 mil trabajadores quedarían sólo tres mil según dijo el líder sindical.
“De tres turnos bajaron uno y es probable que bajen otro y si sigue así se acaba todo, ahorita fueron mil trabajadores los que despidieron, pero si continua de 10 mil trabajadores queden solo 3 mil con empleo”, explicó.
Ante esto la CTM trabaja por proteger y conservar los empleos, sin embargo, en este caso dependen del gobierno de Estados Unidos y México.
Dijo que es lamentable que los discursos del presidente estadunidense provoquen la pérdida de empleos en México ya que tan sólo en la región Sureste de Coahuila el 78 por ciento de la industria depende del ramo automotriz.
“Si se va la General Motors se van muchos proveedores y con ellos mucho empleo y con eso la región Sureste nos convertiríamos en un problema social muy fuerte”, advirtió el líder gremial.
El panorama que describió Berino Granados es de una región con casas de INFONAVIT abandonadas, gente sin empleo y muchos hombres que migrarían a los Estados Unidos.
Indicó que no existe un plan B debido al nivel de dependencia que se tiene a la industria automotriz. (DAVID GONZÁLEZ/INFONOR)