En emotivo evento se realizó la presentación del Libro “Liderazgo Espiritual y Legado Fraternal de Jesús María Echavarría y Aguirre, obra de Gerardo Salvador González Lara, y en donde el rector de la Universidad Autónoma de Coahuila, Octavio Pimentel Martínez compartió sus comentarios de la vida y obra de un personaje que unió a los estados de Coahuila y Sinaloa y a México con Estados Unidos.
En el Centro Cultural Vito Alessio Robles, en el Centro Histórico de Saltillo, asistieron el obispo de Saltillo, Monseñor Don Hilario González, y el padre Humberto González Galindo, los ex rectores de la máxima casa de estudios, Salvador Hernández Vélez y Blas José Flores Dávila, funcionarios universitarios, alumnos del colegio Nicolás Bravo y Hermanas Catequistas Guadalupanas e invitados especiales.
“Nos reunimos para comentar sobre la vida y obra de un gran personaje, religioso que tuvo a bien a unir a dos estados Sinaloa y Coahuila y a dos países, México y Estados Unidos, en una vida interesante y fructífera, porque le correspondió ejercer su mandato religioso como tercer Obispo de Saltillo y Coahuila, en dos momentos de la historia donde se tensaron los enfrentamientos con la iglesia católica, la revolución de 1910 y la llamada Guerra Cristera”, comentó el Rector.
Dijo que fue una vida fructífera por las obras y acciones que se cristalizaron porque su legado sigue vigente, y se plasma en 397 páginas y seis capítulos de este gran libro, que se basó en numerosas fuentes, pero principalmente en el diario personal que de manera metódica y persistente escribió Echavarría y Aguirre de sus experiencias sobre todo en el exilio, el cual se encuentra bajo el resguardo de nuestras hermanas Catequistas Guadalupanas, que representa un valioso patrimonio histórico y literario para conocer la historia de la frontera norte de nuestro país y del sur de Estados Unidos.
Pimentel Martínez, explicó que el obispo fue migrante, inmigrante, exiliado, ex patriado, desterrado y nunca perdió de vista su misión y visión, se mantuvo en contacto permanente con toda la comunidad a su cargo y este libro da testimonio de la huella que el Obispo Jesús María dejó y apoyo de manera permanente a las comunidades migrantes de latinos, que en ese tiempo ya representaban un impacto importante en Estados Unidos.
Afirmó que en las universidades sobre todo en las públicas, confluyen todas las corrientes de pensamiento y tendencias ideológicas, por ser espacios plurales, abiertos y respetuosos de la libertad de ideas, como productoras de conocimiento, estas universidades hacen de la investigación la fuente de generación de nuevas ideas que se apoyan en los antecedentes construidos en el pasado.
“Como corresponde a toda universidad pública, la Universidad Autónoma de Coahuila, es un espacio de pluralidad, de tolerancia de convivencia civilizada y pacífica de todas de cada una de las posturas ideológicas”, afirmó el Rector.
Prueba de ello es lo que realiza la Facultad de Ciencias Sociales, la historia sin proponérselo une a los pueblos, a las comunidades, en este libro Coahuila y Sinaloa fueron testigos de ello, se hermanaron a través de la figura del Obispo Jesús María Echevarría y en su peregrinar fue dejando constancia de su espíritu dedicado e impulsar la educación de los más desfavorecidos
Afirma que el Obispo Jesús María fue un hombre visionario y adelantado a su época porque concibió a la mujer como una persona dotada de grandes potencialidades intelectuales y sociales y sobre todo como pilar de la regeneración de una sociedad, compartió con ellas la responsabilidad de su labor e hizo un modelo de proyección dentro de la iglesia católica a través de un instituto que él fundó, mismo que ha perdurado por más de 100 años.
Por su parte el Dr. Gabino Castillo Flores, comentó que, durante los exilios del tercer obispo de Saltillo, en este libro algunos capítulos permiten al lector comprender mejor los documentos publicados, otros que exaltan el origen y la obra fundacional del prelado, resaltando particularmente su labor educativa y su participación en la creación de instituciones religiosas especialmente del Instituto de Hermanas Catequistas Guadalupanas.
“El obispo es un buen ejemplo de la observación que hacía el filósofo José Ortega, la única forma de entender a los individuos es verlos insertos en sus propias circunstancias, es influyente pensador puso de relieve que la persona estaba formada de dos partes esenciales: el sujeto y el mundo en el que vive, nos desplazamos en un pedazo del mundo en una época específica, cuyo entorno también nos justifica.
“El autor del libro que hoy presentamos, señala que durante el porfiriato las aguas se calmaron un poco y encontró en la iglesia una aliada con la que supo negociar, si bien las Leyes de Reforma estuvieron vigentes en la Constitución su aplicación no fue radical en favor de la concordia y el apoyo mutuo entre el Estado y la institución eclesiástica, el cambio en la política papal fue también fundamental León 13 propuso un nuevo modelo de iglesia más abierto al mundo y ligado a las problemáticas sociales”, afirmó.
Por su parte, el autor, Gerardo Salvador González Lara agradeció la presentación que hizo el rector Pimentel Martínez sobre la obra, realmente está muy precisa, muy adecuada para el espíritu que tiene este libro que es comunicar la vida del invitado especial Jesús María Echaverría y Aguirre, que tuvo conciencia histórica del proyecto y la visión que quería para Coahuila, para México, para la iglesia y como ser humano como un proyecto de vida también.
Su investigación se basó en diferentes archivos de México y Estados Unidos, diarios en México y fuera del país, cartas institucionales escritos personales, cartas con familiares, fotografías, notas periodísticas, libros eclesiásticos y seculares, mensajes a religiosas, entrevistas personales, entre otros, que se integraron para esta investigación.
La larga vida del obispo Echavarría le permitió transitar por diversas etapas de la historia de nuestro país como el Porfirismo, la Revolución Mexicana, la Guerra Cristera, el Cardenismo y los primeros gobiernos civiles, sobrevivió a 20 presidentes de la República y 23 gobernadores de Coahuila.
Gerardo Salvador González Lara, nació en Saltillo, es Licenciado en Ciencias de la Comunicación y cuenta con dos maestrías en Administración por el Tecnológico de Monterrey y en Humanidades por la Universidad de Monterrey, es doctor en estudio Humanísticos, con especialidad en literatura y discurso.
Ha colaborado por 35 años en el Instituto Tecnológico de Monterrey desde 1988 en diversas funciones académicas y administrativas, actualmente es profesor titular del departamento de estudios humanísticos de la misma casa de estudios.
En 2011 ganó el Premio “Rómulo Garza”, y obtuvo la clasificación como profesor titular del departamento de estudios humanísticos, el más alto rango este nombramiento en dos ocasiones más; entre algunos de sus reconocimientos de investigación de fuentes históricas en 2006 y 2007 por el proyecto de recuperación de la memoria hispana en la Universidad de Houston.
En 2022 ganó el Galardón Novus a la innovación educativa del Tec de Monterrey por el proyecto didáctico operes de la memoria, para la recuperación y rescate de la memoria, entre otros muchos otros reconocimientos, coordinador y escritor de libros. (EL HERALDO)
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