Presentan el libro “La Herencia de Stradivarius: Un dilema moral”

Este miércoles se presentó en el Café Relox, ubicado en calle Cuatrociénegas en la Colonia República Poniente en Saltillo, el libro “La Herencia de Stradivarius: Un dilema moral” del autor Nils Skoglund de Quintanilla Ediciones.

Dentro del ciclo de conferencias mensuales que realiza este café, llega esta charla, donde se contó con la presencia Nils Skoglund, autor del libro, quien adentró a los presentes a esta historia contemporánea que mezcla lo real y lo ficticio, puesto que todas las novelas tienen algo de verdad, según Skoglund.

En esta obra literaria, se comparte un estudio a profundidad sobre qué pasó con una mujer llamada Hilde Krüger, quien en 1941 llega a México acusada de ser espía nazi, sin embargo no lo era, se trataba de emisario de Hiltler que vino a América. Primero llegó a Estados Unidos a comprar petróleo, pero es cuando Japón ataca a Pearl Harbor y Hitler apoya a Japón, Estados Unidos interviene, hunden los barcos mexicanos, porque en esos barcos se llevaba petróleo a Alemania. Con esto se obliga a México a participar en la Segunda Guerra Mundial, a hacer una defensa a Filipinas, con el batallón 201, pero México continúo vendiéndoles petróleo, pues era un país neutral.

Estando Manuel Ávila Camacho como presidente de la República Mexicana y Miguel Alemán como secretario de gobernación se le vendía el petróleo a Hilde Krüger, quien pagaba con el dinero que obtenía de la venta de obras de arte, en una casa de subastas que tenían los propios alemanes en la 55 Avenue en Estados Unidos, comparte Skoglund.

El violín que se menciona en la novela, que Hitler lo sacó de Polonia de una casa nazi, este instrumento paso por varias manos, incluso se volvió parte de la mercancía de venta para el financiamiento de la Alemania nazi, en su momento sirvió para financiar una guerra donde murieron 67 millones de personas, de los cuales 19 millones eran soldados y el resto eran civiles, niños, mujeres, gente común. Una guerra que en definitiva no debió existir, por eso se incluye en el nombre del libro, un dilema moral.

“La novela, tiene mucha historia real contemporánea, el cómo llegó de alguna manera a mí este violín. Esta historia vale la pena leerla, tiene cosas fundamentales como lo es la intriga, suspenso, espionaje y sexo, está escrita de una manera sabrosa para que se lo coman, muy digerible. La intención es que este violín debe de dar un mensaje de paz para que no volvamos a caer otra vez en esto”, finalizó Nils Skoglund. (MARIANA FALCÓN)