Dificulta exceso de reglas la operación de instituciones benéficas; asegura director de Fundación Merced 

El director de la Fundación Merced Coahuila, Juan Manuel Pérez Cuéllar, aseguró que la sobrerregulación que desde el nivel federal se ha impuesto a la operación de organismos de la sociedad civil dedicados a la atención de diferentes causas, es un lastre que dificulta enormemente la labor que realizan dichas instituciones, especialmente en favor de la población más vulnerable.

El directivo señaló que ante el reto que representa actualmente la puesta en marcha y el sostenimiento de estas organizaciones, se está trabajando en mecanismos que permitan acceder a los recursos necesarios para continuar con esta labor benéfica y seguir incidiendo positivamente en la comunidad.

“Siempre lo digo y trato de no hacerlo político, pero es una realidad, que la sobrerregulación que se hizo a las organizaciones de la sociedad civil nos costó demasiado. Hoy en día los riesgos de poder dedicarte a ser sociedad civil, de poder dar un donativo, de poder incidir en tu comunidad son muy altos, en riesgo y en costo”, dijo el titular de Fundación Merced.

“Entonces ese es el reto que nos pusimos como sociedad civil, porque nos lo impusieron, el cómo llegamos a más inversiones sociales, ya nos les decimos donativos porque donativos es igual a caridad y nosotros lo que queremos es invertir en nuestra comunidad”, agregó.

Pérez Cuéllar reconoció que pese al reto mayúsculo que implica este exceso de requisitos, es algo que se tenía que hacer, dado que el funcionamiento de estas organizaciones de la sociedad civil se presta a la comisión de delitos como el lavado de dinero.

“Creemos que definitivamente las multas por incumplir con toda esta regulación y los requisitos para que alguien se pueda constituir como una donataria autorizada hoy en día son demasiado altos y no cualquiera los puede hacer, quienes la integren tienen que estar muy bien capacitados”.

“Todo este cambio es algo que desincentivó a las organizaciones de la sociedad civil que ya estaban constituidas y que querían ser donatarias autorizadas, así como también a aquellas personas que tenían una organización en su colonia, que querían poder recibir donativos y que ahora se les complicó porque tienen que buscar más recursos para poder funcionar administrativamente”, puntualizó el director. (ÁNGEL AGUILAR)