Ciudad de México .-Este año algunos estados del país podrían enfrentar desequilibrios operativos si los ingresos que les otorga el Gobierno Federal son menores a los estimados, advierte Moody’s.
Algunos estados podrían enfrentar desequilibrios operativos, debido a que sus presupuestos no contemplan un margen entre sus ingresos por participaciones federales (correspondientes al Ramo 28) y la estimación del presupuesto federal, explica la calificadora en un análisis.
«Para 2024, estimamos que (al igual que en años anteriores ) tampoco se alcanzará el monto presupuestado, con una diferencia de alrededor 40 mil millones, esto es, entre 3 y 4 por ciento menos de lo que se establece en el presupuesto federal», sostiene.
Eso significa que, aunque el Gobierno federal tenga estimado otorgar determinados montos a cada entidad, el monto terminará siendo menor, señala el organismo.
La presupuestación de las participaciones federales es relevante dado el peso que representan en los ingresos operativos, el cual es en promedio de 65 por ciento, detalla.
La calificadora describe que para este 2024, la diferencia promedio entre las participaciones presupuestadas y las observadas respecto al presupuesto federal fue de 4 por cieno, porcentaje relativamente en línea con la estimación de Moody’s Local México.
La Ciudad de México, Querétaro y el Estado de México fueron las entidades con las mayores diferencias, las cuales fueron superiores al 7 por ciento, por lo que la calificadora considera que tienen margen para absorber el gasto programado y registrar balances operativos y financieros positivos.
Sin embargo, destaca que varias entidades han presupuestado montos cercanos al presupuesto federal como Jalisco, Nayarit, Yucatán y Sonora.
Menciona que pese a que los estados cuentan con el Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF) para compensar ingresos por participaciones inferiores a lo presupuestado, este sólo cubre alrededor del 80 por ciento del total de participaciones federales.
Además, resalta, sus recursos no se distribuyen de manera inmediata, por lo que los estados con menor liquidez deberán ajustar su gasto y/o utilizar recursos líquidos de años anteriores en lo que reciben la compensación.
Adicionalmente, es probable que en este año se agoten los recursos de este fondo y no se pueda compensar completamente la diferencia entre las participaciones presupuestadas y observadas.
En consecuencia, si estas entidades no logran ajustar el gasto, registrarían déficits operativos y/o financieros y su liquidez disminuiría y puede verse comprometida en algunos casos, alerta la calificadora.
En ese sentido, destaca que las prácticas de presupuestación son consideradas en la evaluación de Moody ‘s sobre el gobierno interno y administración.
Recuerda que aunque el Gobierno federal establece el monto estimado de las participaciones (ramo 28) para cada año fiscal en su presupuesto de egresos, de 2019 a 2023, las diferencias más importantes entre el monto presupuestado y el observado fueron en 2020 y en 2023.
Menciona que si para este 2024 se tiene un escenario muy optimista y no se alcanza el monto de participaciones presupuestado, será difícil ajustar el gasto y muy probablemente se registre un déficit operativo y financiero.(AGENCIA REFORMA)
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