Washington DC, Estados Unidos.- El Presidente Joe Biden aseguró este viernes que el flujo ilegal de la droga sintética conocida como fentanilo hacia Estados Unidos ha disminuido derivado de las negociaciones diplomáticas que ha sostenido con los Gobiernos de México y China desde mediados de noviembre.
Sin apoyarlo con datos, Biden hizo referencia a una baja en el flujo de fentanilo que llega a EU y que, según la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), es principalmente fabricado por el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) usando precursores comprados en China.
“He trabajado con China y México para frenar el flujo de fentanilo a Estados Unidos y, en estos momentos, está disminuyendo”, dijo Biden esta tarde en un discurso en la Casa Blanca ante la Conferencia de Alcaldes de EU, que celebra su convención anual de invierno en Washington.
Tras años de parálisis, Biden sostuvo un encuentro en noviembre en San Francisco con el Presidente Xi Jinping tras el cual China prometió tomar acciones contra la exportación ilegal de precursores; en la misma ocasión, Biden pactó con el Presidente Andrés Manuel López Obrador más acciones contra el fentanilo.
En su discurso hoy, Biden no aportó estadísticas para apoyar sus señalamientos pero hasta el momento, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EU (CBP, por sus siglas en inglés) reporta que durante el actual Año Fiscal 2024 el total de fentanilo decomisado en la frontera con México es de 1.4 toneladas.
De acuerdo con los datos oficiales, los decomisos de fentanilo en la frontera con México superaron las 12.1 toneladas durante el Año Fiscal 2023, una cifra que representó casi el doble de las 6.3 toneladas de dicha droga sintética decomisadas en la frontera durante el anterior Año Fiscal 2022.
Tan sólo en 2022, autoridades de salud estadounidenses reportaron que el fentanilo importado principalmente desde México fue responsable de más de 75 mil muertes por sobredosis en EU y fue la principal causa de muerte para los estadounidenses entre 18 y 45 años de edad. (AGENCIA REFORMA)
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