El Batallón de San Patricio
Un 25 de septiembre de 1846 fuerzas estadounidenses al mando del General Zachary Taylor capturaban la ciudad de Monterrey. Ocasión también para el primer combate como unidad de artillería mexicana del Batallón de San Patricio, al mando del legendario John Riley, ex-teniente del ejército americano e inmigrante irlandés que, cansado de las injusticias cometidas por los invasores decidió sumarse al bando mexicano. Hay que decir que el general invasor, Zachary Taylor, conocido como «Old, rough and ready», (viejo, rudo y presto), no era cualquier enemigo, incluso, tres años después se convertiría en el primer presidente estadounidense que llegó al puesto sin ser elegido previamente para ningún cargo público, sólo teniendo como antecedente sus victorias militares.
Al año siguiente, el 22 de febrero de 1847 se libraría la famosa «Batalla de la Angostura» al sur de la ciudad de Saltillo, lugar donde también participarían «Los Patricios». Meses después, el 12 de septiembre de ese mismo año, justo antes del ataque americano en Chapultepec, los sobrevivientes del Batallón de San Patricio serían conducidos al pie de la colina de Mixcoac para cumplir una cita con la horca tras la “Batalla de Churubusco”, en la que fueron hechos prisioneros por los americanos.
Un capitán judío amigo de Riley intercedió por él contra su voluntad logrando salvarle de la muerte, pero no de los 59 azotes y las dos marcas con la “D”, inicial de “deserter”, impuestas a hierro candente en cada mejilla. El resto del batallón fue dispuesto al cadalso hecho especialmente para la ocasión, en el que la muerte no llegaba rápidamente por fractura de vértebras, sino lenta y agobiante por asfixia. “Ahorcarlos no es suficiente” decían los americanos. Antes de la orden final, un maltrecho John Riley, alcanzó a balbucir: ¡Batallón de San Patricio!, y sus hombres respondieron: “Presente”, justo antes de morir por la patria.
Héroes que al grito de “México libre” y del “Erin Go Bragh” (Irlanda por siempre), demostraron que la vida, es el precio que se paga por el derecho de entrar en las páginas de la historia.
Excelente lectura recomendada sobre el tema, es el libro «Batallón de San Patricio» del autor italiano, Pino Cacucci, editorial Grijalbo 2018.
Somos lo que hemos leído y esta es, palabra de lector.
Autor
- Columnista
Otros artículos del mismo autor
- OPINIÓN21 noviembre, 2024ALGO QUE VALE LA PENA LEER
- EL MUNDO20 noviembre, 2024Una iglesia de Suiza ofrece confesiones a sus fieles a través de un holograma de Jesús programado con IA
- OPINIÓN14 noviembre, 2024ALGO QUE VALE LA PENA LEER
- OPINIÓN7 noviembre, 2024ALGO QUE VALE LA PENA LEER