Amán, Jodania- A pesar de los intensos bombardeos y advertencias de Israel para evacuar, aproximadamente 400 mil personas permanecen en el norte de la Franja de Gaza mientras los tanques y las tropas terrestres de Tel Aviv avanzan en su intento de destruir los bastiones de Hamas y liberar a los rehenes, informó ayer The Washington Post.
Asimismo, entre 800 mil y un millón de residentes han huido a zonas del sur del enclave palestino, donde también se ven afectados por los ataques aéreos israelíes mientras la guerra en Gaza se acerca a su primer mes de desarrollo.
Durante un periodo de tres horas, Israel ofreció a los habitantes del norte de la Franja la posibilidad de desplazarse por la carretera de Salah al-Din, la principal vía transitable que recorre casi todo el enclave, de 40 kilómetros de longitud.
Los militares israelíes se refieren ahora al sur de Gaza como una «zona más segura», aunque dista de serlo. En el sur también se registran intensos bombardeos, y muchos gazatíes sienten que ningún lugar es seguro frente a la invasión.
«Las morgues están a rebosar. Las tiendas están vacías. La situación sanitaria es pésima. Observamos un aumento de las enfermedades y las afecciones respiratorias, especialmente entre los niños. Toda una población está traumatizada», denunció el Secretario General de la ONU, António Guterres.
Según el Ministerio de Salud del enclave, bajo control de Hamas, los bombardeos israelíes han matado a casi 9 mil 500 personas, de las cuales 3 mil 900 eran niños. (AGENCIA REFORMA)
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