Tec de Monterrey honra el legado de las mujeres al inaugurar la exposición “Cuando el hilo se hace red”

En el marco del 80 aniversario. La exposición, que fue curada entre el Centro de Reconocimiento de la Dignidad Humana, la Escuela de Humanidades y Educación y Patrimonio Cultural, plasma la memoria viva de las mujeres en el Tecnológico de Monterrey. Honrando el pasado, reconociendo el presente e imaginando el futuro. 

Monterrey, Nuevo León.- Como parte de los festejos del 80 aniversario del Tecnológico de Monterrey, la Institución inauguró la exposición “Cuando el hilo se hace red: memoria viva de las mujeres en el Tecnológico de Monterrey”, espacio curatorial que honra y reconoce el legado de las mujeres que han sido parte fundamental en la construcción de un Tec más incluyente, igualitario y equitativo.

De acuerdo con Inés Sáenz Negrete, vicepresidenta de Inclusión, Impacto Social y Sostenibilidad, la exposición presenta una memoria viva con perspectiva interseccional que muestra la diversidad de mujeres que forman parte del Tec: profesoras, directivas, colaboradoras, investigadoras, estudiantes, artistas, deportistas y personal de servicio; lo que nos da una riqueza de la comunidad que ha sido esencial para la Institución.

“Queremos provocar el diálogo y creemos que con este espacio lo lograremos. Aspiramos a ser una institución modelo de sostenibilidad, incluyente y de excelencia, que busca ser un espacio igualitario y con una enorme incidencia social. Una comunidad igualitaria y floreciente en donde nuestras y nuestros estudiantes puedan desarrollar, como lo dijo la escritora Rosario Castellanos, ‘otro modo de ser humano y libre, otro modo de ser‘», agregó Sáenz Negrete.

Asimismo, Felisa González, directora del Centro de Reconocimiento de la Dignidad Humana (CRDH), agradeció la suma de voluntades de las personas y los equipos que participaron en la realización de esta exposición. “Este maravilloso trabajo nos permitirá llevar a la reflexión y diálogo, las distintas realidades y contextos que han vivido las mujeres del Tec durante estos 80 años de historia, con una mirada realista de lo que se ha avanzado y lo que falta por hacer”, compartió González.

La primera sede titulada «Urdir la trama» visibiliza los avances hacia la paridad de género y principalmente la lucha que esto ha conllevado. En sus cuatro etapas, la exhibición tejerá piezas de Patrimonio Cultural del Tec con la perspectiva del CRDH para hilar una narrativa que considera las interseccionalidades de las mujeres y cuenta la historia de la Institución a nivel nacional, articulada a través de cada una de las regiones del país en donde hay campus.

Por su parte, Judith Ruiz Godoy, decana Nacional de la Escuela de Humanidades y Educación (EHE), comentó que esta exposición es mucho más que un grupo de fotografías de archivo, ya que a través de esta memoria colectiva se puede ser testigo de historias que se tejen y entretejen en un entramado entre el pasado, presente y hacia el futuro.

«En diversas mitologías, y desde tiempos ancestrales, las mujeres hemos hilado: diosas, musas, escritoras; todas han sido tejedoras de la memoria que ha sido testigo de grandes acontecimientos, desde tragedias hasta felicidades. Así también lo hacen las colectivas y las mujeres de las comunidades originarias que han encontrado en los telares resguardo e identidad», puntualizó Ruíz Godoy.

Las sedes de esta exposición serán:

  • Campus Monterrey: “Urdir la trama”, que visibiliza los avances hacia la paridad de género y, principalmente, la lucha que esto ha conllevado.
  • Campus Querétaro: “Recaudo para coser palabras”, que se centrará en las tensiones entre saberes relegados y su incorporación en el mundo profesional.
  • Campus Guadalajara: “Resistir en los retazos”, dedicada a visibilizar estos esfuerzos y acercarse a los debates más recientes.
  • Campus Ciudad de México: “Tejer la modernidad”, se muestra cómo las mujeres han ido habitando los espacios.

Para finalizar, David Garza Salazar, rector y presidente ejecutivo del Tecnológico de Monterrey, invitó a la reflexión sobre lo que ha pasado a lo largo de estas ocho décadas, ya que desde los primeros años de historia, la institución fundada por Eugenio Garza Sada contó con grandes mujeres profesoras, entre ellas: Mercedes Martí y Dolores Velázquez; y estudiantes como Graciela Soriano Morelos, María Luisa Martínez Paez y Laura Ruano Méndez.

«Desde nuestra fundación, en 1943, hemos avanzado y marcado un liderazgo en las distintas comunidades de nuestro país, por ejemplo: fuimos la primera institución en América Latina en otorgar títulos en femenino; y recientemente nos hemos alineado a compromisos internacionales con organismos como ONU Mujeres. En el Tec de Monterrey buscamos seguir avanzando en temas de equidad de género. En 2019, la Institución registraba un 18 por ciento de mujeres en puestos de liderazgo, hoy, cuatro años más tarde, tenemos un 27 por ciento. Estos datos reflejan avances pero también brechas que debemos de cerrar», agregó Garza Salazar.

Sede “Urdir la trama”

Presenta 32 objetos entre los que destacan reproducciones de obras de arte de David Alfaro Siqueiros y Patricia Torres, fotografías del acervo de Patrimonio Cultural del Tecnológico de Monterrey, así como, recortes de periódico del archivo de la colección de Arte, A.C. La propuesta curatorial explora la expresión de las mujeres en la Institución de manera colectiva dividida en cinco núcleos temáticos en donde se exploran los temas de representación y autorrepresentación, división del trabajo, diversidad de lugares conquistados y recuperación de las historias de las mujeres. El objeto clave para entender la sede es el primer título en femenino emitido por la institución en 1978.

En el marco del 80 aniversario, el Tecnológico de Monterrey invita a la comunidad a vivir y reconocer el legado, las acciones y esperanzas de las mujeres que han dejado huella en sus aulas, espacios de trabajo, jardines, pasillos y en cada rincón de esta Institución.

La exposición también se encuentra disponible en el Tec Virtual Campus, un espacio virtual en donde las y los estudiantes pueden tener experiencias de aprendizaje dentro del metaverso. (EL HERALDO)