Víctor y su viaje en La Reina
En esta ocasión te platico la historia de un Saltillense quien ha demostrado una vez más que, como se dice de manera coloquial: “el mundo es un pañuelo”. Me refiero a Víctor Ramos del Bosque.
Desde hace 8 meses, la primera semana de diciembre del 2022 para ser precisos, Víctor inició una travesía para recorrer todo América Latina montado en su motocicleta Scotter BMW 650, partiendo desde la vecina ciudad de Monterrey.
El kilómetro cero de esta travesía fue en México, cruzando por Tapachula, Chiapas a Guatemala, donde disfrutó de un delicioso pepián; de ahí llegó al segundo País más grande de Centroamérica, Honduras, cruzando la frontera de ese País hacía la tierra del ron “Flor de Caña”, es decir, a Nicaragua. De ahí llegó a El Salvador para comer pupusas, entrando a Costa Rica por Peñas Blancas para después deleitar su vista con el Canal de Panamá, llegando después a Colombia para tomar un buen café, aunque no tan bueno como nuestro café Oso, cruzando el paralelo cero precisamente en Ecuador. Después, aprovechó que aún teníamos buenas relaciones con Perú, para cruzar por ese País y llegar a uno de los dos países de América que no cuentan con costa marítima, Bolivia.
De ahí llegó a tomarse un buen vino tinto, claro no tan sabroso como el que se elabora en San Juan de la Vaquería, a Chile; para llegar después al punto más sureño de su recorrido, Buenos Aires, Argentina. Desde la tierra del tango empezó a subir primero por la tierra de Mario Benedetti, Uruguay, arribando a la Triple Frontera entre ese País con Paraguay, el cual es el otro País sin costa, y Brasil, País en el cual montó su motocicleta a un barco carguero por tres días desde Porto Belo hasta Manaos, para así cruzar el Amazonas, llegando a Venezuela. Fue estando en Puerto Ordaz cuando supe de la gran historia en motocicleta del Saltillense Víctor.
Y sí se pregunta de cómo me enteré, déjeme decirle estimada y estimado Saltillense que tengo un amigo quien se llama Fadi Monir Darib, de origen sirio y residente precisamente de Puerto Ordaz, Venezuela, quien casualmente también es motociclista, quien de manera aún más casual se encontraba en un bar de motociclistas llamado “Ruta 58”, lugar dónde la casualidad podría ser aún mayor, pues ahí estaba también el Saltillense. Fadi se acercó a Víctor, le preguntó: ¿De dónde eres?, a lo que Víctor le dijo: Soy de Saltillo, pero vivo en Monterrey. Fadi le reviró con la afirmación: tengo amigos que son como familia allá en Saltillo, tal vez los conozcas, uno de ellos se llama Francisco Tobías. Víctor le dijo: “Claro que lo conozco desde hace muchos años, es amigo de la familia”. El Saltillense estaba hablando de Francisco Tobias Mahbub, mi papá. Tan chiquito el mundo, que allá en Puerto Ordaz, Venezuela, a un Saltillense que ha recorrido más de 27 mil kilómetros, montado en su motocicleta llamada con cariño “La Reina” le preguntaron por un Saltillense.
Cuando hablé con Víctor, le pregunté por alguna anécdota, asegurándome que ha vivida tantas cosas buenas, en tantos kilómetros recorridos, en tantos pueblos, en tantos caminos, en tantos mercados, en tantas gasolinerías, que definitivamente son muchas las vivencias agradables que le ha dejado esta travesía.
Le pregunté que cómo se había animado a este viaje, a lo que me dijo que no la pensó mucho, que antes de iniciar este recorrido, solamente le pasó por la mente la pregunta: ¿Ahora a dónde? Pues ya había recorrido muchos caminos y carreteras en México arriba de su motocicleta, por lo que sólo se subió a esta y empezó a darle, pensando que sólo serían como 5 meses, y ya van 7 más lo que faltan. “Para qué darle prisa, y para qué pensar en el tiempo, si estoy disfrutando y viviendo”.
Esta es la historia que está escribiendo Víctor Ramos del Bosque, el Saltillense que llegó montado en su motocicleta llamada “La Reina” hasta Buenos Aires, Argentina, quien ya viene de regreso y al llegar a Puerto Ordaz en Venezuela le preguntaron por un Saltillense, contestando que conoce al original. Esta es la historia de Víctor, quien en realidad no viaja tan sólo, pues su compañero de viaje se llama Tony, y es un oso de peluche que se encontró abandonado en otro viaje que realizó a Madrid, España. Por supuesto que a ese viaje no se fue en moto.
La historia de Víctor, el motociclista de Saltillo es una de esas historias que demuestran una vez que los Saltillenses estamos en todos lados, poniendo en alto el nombre de México y de nuestra hermosa ciudad de Saltillo.
Aviso de ocasión
Rento trece mulas mansas para uso libre. Son las mismas que, como todos se enteraron, el capitán Joseph Méndez Tovar utilizó y que no me había pagado. El precio es de 90 pesos en reales. Atentamente, María García.
Anuncio publicado el 1 de junio de 1672 en la Villa de Santiago del Saltillo.
Autor
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Es Saltillense*, papá de tres princesas mágicas, Rebeca, Malake y Mariajose. Egresado de nuestra máxima casa de estudios, la Universidad Autónoma de Coahuila, en donde es catedrático, es Master en Gestión de la Comunicación Política y Electoral por la Universidad Autónoma de Barcelona, el Claustro Doctoral Iberoamericano le otorgó el Doctorado Honoris Causa. Es también maestro en Administración con Especialidad en Finanzas por el Tec Milenio y actualmente cursa el Master en FinTech en la OBS y la Universidad de Barcelona.
Desde el 2012, a difundido la historia, acontecimientos, anécdotas, lugares y personajes de la hermosa ciudad de Saltillo, por medio de las Cápsulas Saraperas.
*El autor afirma que Saltillense es el único gentilicio que debe de escribirse con mayúscula.
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