Luego de que el colegio Maker de Saltillo fuera señalado hace poco más de dos años por la denuncia de un abuso sexual de uno de los alumnos de esta institución, la institución fue multada con 350 mil pesos por omisión de cuidados, de acuerdo con Denise “N”, la madre del menor afectado, quien señaló que ya tiene las resoluciones y entablará una demanda millonaria por la vía civil contra este plantel particular.
A decir de la madre de familia, se cuenta con la resolución de la Procuraduría de los Niños, las Niñas y la Familia (Pronnif) y de la Secretaría de Educación estatal donde señalan negligencia y omisión, por lo que haría una millonaria demanda para la reparación del daño, la atención psicoemocional de su hijo y todos los gastos que se hayan realizado en torno a la denuncia del caso.
Aclaró que en ningún momento buscaban obtener dinero, pero ante la indiferencia del colegio que nunca se acercaron ni los papás de los agresores, se va seguir hasta las últimas consecuencias con una demanda por daño moral.
“Están levantando cargos contra el colegio por omisión de cuidados y negligencia. Se dictó en noviembre, pero hasta hoy tengo ya el expediente en mis manos con copias certificadas donde están multando al colegio por más de 350 mil pesos”, reiteró Denise “N”.
Recordó que se dieron en su momento los citatorios, y que los que nunca acudieron fueron los papás del menor agresor, y por parte del colegio se revictimizó al menor afectado, por lo que se entablará la demanda civil.
“Ese dinero lo van a tener que pagar, es una multa en lo que los están castigando la SEP por no cuidar a mi hijo por omisión y negligencia. Ese cobro lo hace la Secretaría de Hacienda. Con este expediente de la Pronnif y SEP, estamos armando la demanda civil. Vamos a demandar al colegio por daños moral por lo que sabes son demandas millonarias”, adelantó.
Fue en septiembre del año 2021 que los hechos fueron denunciados por la madre en el colegio Maker. En esa ocasión la madre señaló en una entrevista que su hijo fue atacado en el salón de clases antes de la hora de recreo por un compañero de su misma edad.
Fue hasta inicios de abril del 2022, cuando la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia (Pronnif), concluyó con su investigación, donde el niño fue sometido a una serie de pruebas que arrojaron que su versión de los hechos era real.
Por su parte la institución educativa, fue señalada de ‘minimizar’ el problema y ‘revictimizar’ a la víctima.
Además, se reservó a dar una respuesta y contrario a proceder contra el presunto agresor, los directivos lanzaron una campaña de “desprestigio” que “invalidaba” las acusaciones de la víctima, calificando como una “travesura” las acciones del otro estudiante. (DAVID GONZÁLEZ/INFONOR)
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