EL BERRINCHE DE MEJÍA Y EL BOQUETE A MORENA

El precandidato a gobernador de Coahuila por el Partido del Trabajo, Ricardo Mejía Berdeja, está más cerca de la inhabilitación que de poder ser admitido por las autoridades electorales como candidato.

Y es que desde el mes de octubre pasado por parte del Instituto Electoral de Coahuila (IEC) se había advertido que Mejía Berdeja venía incurriendo en irregularidades al sobreexponer su imagen en espectaculares, lonas y redes sociales, lo que constituía actos anticipados de campaña. El exsubsecretario de Seguridad Pública federal desoyó los llamamientos del IEC, cuyas resoluciones fueron avaladas y confirmadas primeramente por el Tribunal Electoral de Coahuila y posteriormente por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

Rechazado por Morena, enfrentado con su precandidato y su coordinador, Armando Guadiana y Luis Fernando Salazar; con el líder nacional de dicho partido, Mario Delgado y distanciado con el mismo presidente Andrés Manuel López Obrador, que pidió no usar su nombre, Mejía Berdeja renunció al cargo de subsecretario y recurrió al PT para entrar a la contienda, pero no ha retirado los espectaculares, sino solamente algunos, de acuerdo con el IEC. El consejero presidente, Rodrigo Paredes, advirtió apenas este martes que una vez que el TEPJF confirmó que Ricardo Mejía incurrió en actos anticipados de campaña y no ha retirado su publicidad, se le podría negar el registro como candidato.

Sabedor de que a estas alturas y dentro de este adverso panorama, con seguidores que le dan la espalda, tiene nulas posibilidades de convertirse en gobernador, parece que a Mejía Berdeja no le queda sino el camino de la victimización. Los precandidatos de las coaliciones PRI-PAN-PRD y de UDC-PVEM, Manolo Jiménez Salinas y Lenin Pérez Rivera, despliegan sus respectivas precampañas por todo el Estado, en tanto que Ricardo Sóstenes Mejía está impedido para realizar proselitismo. Su opción es seguir violando las leyes electorales. Pero participe o no como candidato, el acapulqueño ya le hizo un boquete a Morena y le allana el camino de la victoria al PRI y sus aliados. El berrinche del excolaborador de AMLO es de tal magnitud que nos dice que celebrará la eventual derrota de Guadiana Tijerina y Morena.