La Reina ha muerto, ¡Viva el Rey!

Isabel II muere a los 96 años de edad, tras 70 años y 214 días en el trono. Su hijo, Carlos III, es el nuevo rey del Reino Unido

Londres, Inglaterra.-  Este jueves murió la reina Isabel II de Reino Unido a los 96 años.

“La Reina murió pacíficamente en Balmoral esta tarde (jueves). El Rey Carlos III y la Reina Consorte permanecerán en Balmoral esta noche (jueves) y regresarán a Londres mañana (viernes)”, informó la familia real.

El palacio de Buckingham, residencia oficial en Londres de Isabel II, ha bajado la bandera británica a media asta tras anunciarse la muerte este jueves de la reina en el castillo escocés de Balmoral.

La muerte de la soberana, que el pasado martes recibió a la nueva primera ministra británica, Liz Truss, en Escocia significa que los primeros actos se celebrarán allí, conforme a la llamada operación Unicornio, tras lo cual sus restos mortales serán trasladados a Londres para proceder al funeral del Estado.

Isabel II, considerada por los británicos como “la reina eterna”, llegó al trono de Inglaterra por una carambola del destino, pero aprendió rápidamente las tareas propias de su cargo y convirtió el respeto a los protocolos y la protección a ultranza de la corona británica las principales características de su reinado, el más longevo del mundo.

La reina, quien falleció este jueves a los 96 años de edad, era considerada hasta hace unos años como una mujer de hierro, a la que nada, ni los más graves escándalos de la corona, ni los problemas británicos, podían vencer. Pero su salud se fue mermando en los últimos años y se le veía en ocasiones molesta, por sus problemas de movilidad.

La forma en que llegó al trono fue casi accidental. Su padre, quien reinó bajo el nombre de Jorge VI, accedió al trono luego de que su hermano mayor, Eduardo, decidiera abdicar sorpresivamente en 1936. El motivo: se negó a rechazar a la mujer de su vida, la estadounidense Wallis Simpson, con quien no podía contraer matrimonio por estar doblemente divorciada.

La inesperada dimisión de Eduardo convirtió en soberano a su hermano menor, lo que provocó a su vez que la primogénita de éste, Isabel, pasara a encabezar la línea de sucesión de los Windsor.

Nacida en 1926, la futura reina de Inglaterra a quien familiarmente se la conocía como Lilibeth, tuvo una de sus primeras actuaciones destacadas durante la II Guerra Mundial, aleccionando a las tropas y sumándose activamente a las tareas de apoyo civil.

En 1947 se casó con Felipe, duque de Edimburgo. Fogoso y rebelde, Isabel II soportó en silencio diversas aventuras. Con el tiempo, Felipe de Edimburgo pondría fin a sus desplantes para convertirse en un consorte ejemplar. Tuvieron cuatro hijos: Carlos, Ana, Andrés y Eduardo.

Aficionada al senderismo, la cría de caballos y manejar autos todo terreno, vivió uno de sus momentos más complicados con la separación de su hijo, el príncipe Carlos, de la muy querida princesa Diana, que se robó el corazón no sólo de los británicos, sino del mundo.

Se le criticó en su momento el distanciamiento con Diana y haber guardado silencio ante el affaire de Carlos con Camila, a quien recientemente la reina dio su apoyo como futura reina consorte.

Entre sus logros como soberana destaca su gira internacional en 1953, apenas coronada, en la que contribuyó activamente a reforzar la imagen de su país en momentos en que se acentuaba el declive del imperio británico.

Puso especial interés en preservar a través de la Commonwealth, un organismo por el que siempre sintió especial devoción, el espíritu comunitario y el ascendiente simbólico de la corona sobre sus antiguas colonias.

A pesar de su juventud y su inexperiencia cuando accedió al trono, Isabel II llegó con el paso del tiempo a erigirse en líder indiscutible del Reino Unido y la Iglesia anglicana, como prominente defensora de la fe, sin que nadie cuestionara su autoridad más allá de los pasillos, lo que evidenciaba su habilidad a la hora de guardar distancia con los otros poderes y regentar conforme a los principios constitucionales, aunque no era una mujer ilustrada.

En los últimos tiempos, Isabel II debió afrontar la difícil salida del Reino Unido de la Unión Europea (Brexit), formalizada a principios de 2021, un capítulo en el que fue ampliamente criticada por no haber hecho algo para evitar la ruptura, y el estallido de la pandemia del Covid-19, que afectó especialmente a su país y sobre la que la reina solo pudo expresar sus buenos deseos de vencerla «unidos y decididos». Ella misma terminó contagiada, uno de los múltiples eventos en los que se desató la preocupación por su salud. Sin embargo, sólo padeció efectos mínimos.

Otra controversia se desató cuando, en medio de un gran escándalo por presuntos abusos sexuales, tuvo que retirar a su hijo predilecto, el príncipe Andrés, de sus deberes públicos.

Un importante revés para Isabel II sería el protagonizado a principios de 2021 por su nieto Harry y su esposa Meghan Markle, duques de Sussex, quienes huyeron de Londres para fijar su residencia en Estados Unidos al no poder soportar la presión de Buckingham y el acoso mediático. Harry y Meghan se encargaron de ventilar públicamente algunas secuencias bochornosas de los royal, entre ellas la preocupación que surgió en palacio ante la llegada del primer hijo de la pareja y su probable piel oscura.

También en esta ocasión la reina dio muestras de profesionalidad mediando entre las partes, acercando posturas y proponiendo alternativas razonables para evitar otra crisis.

Con su fallecimiento, Isabel II deja un vacío enorme en Reino Unido. Uno que Carlos, pese a ser el heredero de la Corona, no podrá llenar. No posee ni el carisma, ni la fortaleza de su madre. Para algunos, la muerte de la reina podría marcar el principio del fin de la monarquía británica. (EL UNIVERSAL)

EL REINADO MÁS LARGO DE LA HISTORIA

Su reinado duró del 6 de febrero de 1952 al 8 de septiembre de 2022, un total de 70 años y 214 días. Fue la sexta mujer en ascender el trono británico y la monarca que más tiempo reinó. En septiembre del 2015 rompió el récord impuesto por su tatarabuela, la reina Victoria, (1837-1901) quien reinó durante 63 años y siete meses.

CARLOS III, HEREDERO AL TRONO

Carlos, el príncipe de Gales, es el heredero del trono de su madre, la reina Isabel II quien ya había manifestado su voluntad hace unos años, cuando indicó “Es mi sincero deseo que la Commonwealth continúe ofreciendo estabilidad y continuidad para las generaciones futuras, y decida que algún día el Príncipe de Gales debe continuar con el importante trabajo iniciado por mi padre en 1949”. Esas fueron sus palabras en 2018, después de que él fue votado por unanimidad para ser el próximo jefe.

Según el Protocolo de London Bridge , «El príncipe de Gales será proclamado soberano a las 10 de la mañana del día después del fallecimiento («D+1″). Además, en los días previos al funeral realizará una gira por todo el Reino Unido, comenzando en Escocia y finalizando en Gales», tal como reprodujo EFE en 2021.

Ahora, con la muerte a los 96 años de la Reina Isabel II, anunciada este 8 de septiembre , el Príncipe Carlos de Gales se convertiría en el soberano del Reino Unido. Y bajo el título de Rey fue que comunicó la muerte de su «amada madre».

Charles Philip Arthur George tiene 73 años, es el heredero con más años de servicio en la historia británica y es el mayor de los cuatro hijos de la reina y su difunto esposo, el príncipe Felipe.

La reina Isabel asumió el trono a los 25 años, cuando el príncipe Carlos tenía apenas 3 años. Los títulos de Carlos también incluyen, antes de asumir la Corona, los de Príncipe de Gales, Duque de Cornualles, Duque de Rothesay y Conde de Carrick. (Con información de expansión.mx)