“El caso Cassez-Vallarta: Una novela criminal”, serie documental que devela el clasismo y racismo imperante en México
México es un país racista y clasista, que a todas luces hace caso omiso de los derechos humanos para transformarlos en la ley del más fuerte, del más rico y poderoso, al menos esa inmisericorde e inapelable visión es la que nos presenta Gerardo Naranjo en su documental “El caso Cassez-Vallarta: Una novela criminal”, disponible en la plataforma de video bajo demanda, Netflix.
El documento visual, basado en el libro “Una novela criminal», de Jorge Volpi, nos narra en 5 episodios, una de las más deleznables etapas políticas y policiales del México contemporáneo, en donde no solo se inventan culpables, también se responde a intereses de personajes de gran poder político como el empresario Eduardo Margolis, quien de acuerdo con la narrativa de Naranjo, pudo ser el autor intelectual de la detención de la francesa Florence Cassez y su pareja sentimental, el mexicano, Israel Vallarta, por un asunto de venganza económica.
Retomando las voces de muchos de los implicados en el montaje mediático, parte indispensable de esta comedia negra de la vida real, se describe el martirio que tuvieron que pasar Cassez y gran parte de la familia de Israel Vallarta, luego de que el 9 de diciembre de 2005, el reportero Pablo Reinah de Televisa, parte del equipo de Carlos Loret de Mola en Primero Noticias –aparentemente enterado de todo-, acudieran al rancho Las Chinitas a realizar la cobertura de una supuesta detención que realizaran agentes de la Agencia Federal de Investigación (AFI) de presuntos secuestradores, falsamente realizada en vivo.
Con esta denigrante secuencia comienza la desventura de los implicados, que tiene varias etapas a través de años de falsas acusaciones y presentación de pruebas que en apariencia deberían haber dado la libertad a los implicados por la falta de argumentos para tenerlos en prisión, sin embargo, la participación activa de tres personajes clave en el caso perpetró el proceso. Me refiero a Genaro García Luna, secretario de Seguridad Pública en el gobierno de Felipe Calderón, el propio presidente de aquella época y Luis Cárdenas Palomino, brazo derecho del primer implicado.
La serie, está llena de situaciones repugnantes, demostradas cada una de ellas ante la opinión pública, incluyendo el trabajo de complicidad de Loret de Mola, Televisa, TV Azteca y otros medios de comunicación que demostraron una tremenda falta de ética.
Retumbando fuerte, se expresa en “El caso Cassez-Vallarta: Una novela criminal”, una frase denigrante y artera, que muestra un claro racismo por parte de dos de los implicados, Eduardo Margolis y Florence Cassez, cuando en una llamada, prácticamente al final de la serie, el primero expresa que no quería perjudicarla, solo quería afectar a su pareja, Israel Vallarta y a toda su familia, porque dice, “tú y yo somos hombres blancos, Florence”.
El documental en sus conjunto es un testimonio crudo de que, al menos en esa época, si no es que ahora también, el racismo y el clasismo se manifiestan fuerte en la sociedad mexicana.
Sólo le recuerdo que la imaginación se disfruta más en la oscuridad del cine, así que no deje de asistir a su sala favorita. Para dudas, comentarios o sugerencias escríbame al correo electrónico trejohector@gmail.com o sígame en mis redes sociales “Cinematografo04” en Facebook y Spotify, así como “Cinematgrafo04” (sin la “ó”) en Twitter.
Autor
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Periodista, escritor y catedrático. Lic. en Periodismo y Comunicación Colectiva por la UNAM y actualmente maestrante en Comunicación por la UACH.
Titular de columna "Cinematógrafo 04". Imparto Taller de Micrometrajes Documentales, así como el Diplomado en Cine y Cultura Popular Mexicana.
Ganador del premio a la investigación Ana María Agüero Melnyczuk 2016, que otorga la Editorial argentina Limaclara
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