El Consejo de Seguridad de la ONU aprueba la entrada de ayuda humanitaria seis meses más para Siria

((Xinhua/Loey Felipe/ONU) (sm) (ra) (vf) 

Ginebra, Suiza.- El Consejo de Seguridad de la ONU adoptó este martes una resolución que autoriza las entregas transfronterizas de ayuda humanitaria a Siria durante seis meses más, hasta el 10 de enero de 2023, a través del único cruce que permanece abierto para tal efecto, Bab al-Hawa, en la frontera sirio-turca.

El texto -que obtuvo doce votos a favor y tres abstenciones: Estados Unidos, Francia y el Reino Unido-, fue impulsado por Irlanda y Noruega en un esfuerzo por zanjar la brecha entre dos posiciones que impidieron renovar la entrada de asistencia antes del vencimiento el 10 de julio pasado, estipulado en la última resolución aprobada para esas operaciones humanitarias en julio de 2021.

El documento adoptado establece la intención de conseguir una prórroga adicional de seis meses que requeriría una nueva resolución del Consejo de Seguridad y solicita al Secretario General que siga informando al menos cada dos meses sobre la implementación de las resoluciones para Siria.

Esta extensión de la autorización, precisa el texto, “está sujeta a la presentación del informe sustantivo del Secretario General centrado particularmente en la transparencia de las operaciones y el progreso del acceso transfronterizo para satisfacer las necesidades humanitarias”.

Documento conciliatorio

El viernes pasado, dos proyectos de resolución fracasaron en el máximo órgano resolutivo. El primero, patrocinado también por Irlanda y Noruega, buscaba ampliar por un año la apertura del cruce Bab al-Hawa y recibió el apoyo de trece países, la abstención de China y el veto de Rusia.

La segunda propuesta, presentada por Rusia, planteaba la extensión por seis meses de la entrada de socorro por el mismo punto, que conecta con la provincia de Idlib, el último bastión de la oposición al gobierno sirio. Rusia y China apoyaron ese borrador, mientras que Estados Unidos, el Reino Unido y Francia votaron en contra y los diez miembros no permanentes se abstuvieron.

La resolución 2585, aprobada este martes, concilia de alguna manera ambos textos, al ajustarse a los seis meses originalmente propuestos por Moscú pero abriendo la posibilidad de una nueva ampliación de seis meses con una nueva disposición del Consejo en enero próximo, cuando expire el documento ahora vigente.

Cuestión de vida o muerte

El Secretario General de las Naciones Unidas, señaló que la ayuda transfronteriza es esencial para la población en Idlib.

“Es una cuestión de vida o muerte para mucha de esa gente”, declaró António Guterres ante la prensa.

Guterres añadió que si bien la ONU había solicitado la renovación de la autorización por un año y sólo se aprobaron seis meses, espera que “se renueve” cuando ese medio año haya transcurrido.

La resolución hará posible que la ONU continúe trabajando para salvar vidas y aliviar el sufrimiento de 4.1 millones de personas que precisan ayuda y protección en el noroeste de Siria.

El portavoz de Guterres, Farhan Haq, enfatizó que para esas personas las operaciones transfronterizas de la ONU “siguen siendo un salvavidas indispensable”.

Haq informó que la ONU también continuará apoyando las iniciativas de recuperación temprana y el acceso humanitario a través de todas las modalidades.

Mantener el mecanismo transfronterizo

Tras la adopción de la resolución, la embajadora de Irlanda ante la ONU, dijo que lo más importante es que continúe operativo el cruce para la entrada de ayuda a Siria.

“Que con esta resolución, el Consejo de Seguridad mantenga el mecanismo transfronterizo abierto y en funcionamiento, que la asistencia humanitaria continúe llegando a quienes la necesitan”, recalcó Geraldine Byrne Nason.

A Rusia no le importa

En su intervención para explicar la abstención de su país, el representante alterno de Estados Unidos ante la Organización, destacó la escasez de alimentos en Siria, agudizada por la disminución de las exportaciones de trigo y petróleo rusas y ucranianas debidas a la guerra entre esos países.

Richard Mills responsabilizó a Rusia de las necesidades extremas de los sirios, afirmando que son resultado directo “de la invasión a Ucrania” y la alteración que ésta ha causado en los sistemas alimentarios mundiales. “Pero la verdad es que eso no le importa a Rusia”, acusó.

Respetar los intereses de otros Estados

Por su parte, el embajador alterno de Rusia sostuvo que el mundo no está limitado por los países occidentales y que ya es hora de que se acostumbren a respetar los intereses de otros Estados.

“Sobre todo, los de los Estados afectados directamente por las decisiones del Consejo de Seguridad”, apuntó Dmitry Polyanskiy.

El diplomático ruso añadió que su país va a monitorear el progreso y la implementación de la resolución adoptada hoy para decidir el camino a seguir.

En el mismo tenor, el representante alterno de China, Dai Bing, señaló que la asistencia humanitaria a los sirios “debe respetar la soberanía de Siria y la autoridad del gobierno sirio”. (ONU NOTICIAS)