EL METROBÚS, SIN EXCUSA NI PRETEXTO  

Sin excusa ni pretexto, el proyecto del Metrobús Laguna tendrá que ser un hecho concreto y en plena operación en el mes de octubre a más tardar. Y no solo porque el gobernador del Estado, Miguel Ángel Riquelme Solís, haya empeñado su palabra apenas este martes, sino por todo lo que implica el moderno sistema de transporte.

Dentro de seis meses vencerá la sexta y definitiva prórroga que el Banobras otorgó al gobierno estatal para poner en funcionamiento el llamado BRT (Bus Rapid Transit). De no ser así, la institución crediticia demandará la devolución de los 400 millones de pesos que ciertamente se ejercieron, junto con otra cantidad similar que aportó el Estado, en la construcción de estaciones, ciclopista, paraderos y colocación de fibra óptica y concreto hidráulico.

Riquelme Solís ha advertido que así como son una realidad obras significativas como el Teleférico, el Centro de Convenciones, el Centro Deportivo y Cultural La Jabonera y el Paseo Morelos, lo será el Metrobús. El ejercicio de los recursos ha solventado las observaciones derivadas de las auditorías realizadas por la Federación, dijo el mandatario para rechazar que haya habido desvío de recursos.

La obra física está prácticamente terminada y de hecho sólo falta concluir el modelo de negocios, cuyos términos ya están definidos, la conformación de una empresa integradora que aglutine a concesionarios de transporte y autoridades estatales y municipales, determinar el monto de la tarifa, y la adquisición de las unidades apropiadas para la prestación del servicio, que no puede aplazarse más, que resulta urgente e indispensable para una ciudad de las dimensiones de Torreón, junto con Matamoros. La administración que encabeza Riquelme Solís tendrá que “ponerle a la bola” con más dinero para agilizar y facilitar la compra de los autobuses.

A estas alturas y después de un largo retraso, la puesta en marcha del Metrobús resulta una prioridad entre las prioridades, incluso sobre otras obras como los sistemas viales en el crucero de Cuatro Caminos y en Villa Flores porque hay obras viales al oriente de la ciudad que no han podido ser concluidas como un tramo del segundo libramiento.