Panorama electoral de 2022, primeras señales
En junio de 2022 se llevará a cabo el cuarto ciclo electoral posterior al triunfo de AMLO. En este lapso de tiempo, se han celebrado tres elecciones locales y una concurrente del ámbito federal, influenciadas todas ellas por la presencia, de una forma u otra, del presidente de la República.
En términos generales, la intervención presidencial acarreó buenos resultados para Morena y sus aliados; por citar un ejemplo, de 17 gubernaturas disputadas en estos tres años, la 4T triunfó en 14, incluyendo San Luis Potosí ganada por el Verde.
Sin embargo, algunas grietas aparecieron en cada uno de los procesos electorales en los que Morena ha participado como partido en el poder, destacando la pérdida de la mayoría absoluta en la Cámara de Diputados y el triunfo de la oposición en nueve alcaldías de la Ciudad de México en 2021.
Estas fisuras en la maquinaria electoral del oficialismo, son interpretadas por la oposición como victorias. Por lo tanto, crece el entusiasmo de los líderes del PRI, PAN, PRD y Movimiento Ciudadano para disputar al partido del presidente al menos cuatro de las seis gubernaturas que se renovarán en este año.
Las elecciones locales de 2019 fueron las primeras con AMLO en el poder. Su partido obtiene triunfos en las dos gubernaturas en disputa, Baja California y Puebla (elección extraordinaria). En Quintana Roo, Morena gana 11 de 15 diputados de mayoría.
Las grietas, no obstante, surgen en Tamaulipas, Aguascalientes y Durango. En el primero, Morena pierde frente al PAN en 21 de los 22 distritos para renovar el Congreso local. Asimismo, en las otras dos entidades, la mayoría de los ayuntamientos fueron obtenidos por PAN, PRI y PRD, ya sea en forma individual o en alianza.
Por su parte, en 2020 las fisuras se hacen más evidentes, ya que Morena tuvo que enfrentar dos bastiones del PRI. En Coahuila, el PRI obtuvo la totalidad de los distritos para renovar el Congreso local. Mientras que en el estado de Hidalgo, Morena sucumbió, también frente al PRI, en la mayoría de los municipios.
No obstante las grietas de 2019 y el revés sufrido en 2020, Morena llegó al 2021 presumiendo la más alta intención de voto en la mayoría de los estados y distritos federales. El día de las elecciones, los pronósticos se hicieron realidad, ya que la 4T triunfa en 12 de las 15 entidades en disputa y asegura una mayoría calificada en la Cámara de Diputados.
El presidente y su partido celebraron la elección del año pasado al grado de identificarla como un triunfo histórico. Hasta que, en el recuento de los daños, la oposición cantó victoria en un significativo número de distritos federales, impidiendo que la 4T obtuviera la mayoría absoluta de la Cámara de Diputados.
Al mismo tiempo, la alianza “Va por México” presumió hasta el cansancio haber ganado en nueve de las 16 alcaldías de la Ciudad de México, así como en varias capitales y municipios importantes electoralmente, destacando Puebla, Veracruz, Hermosillo, San Luis Potosí, Toluca, Saltillo, entre otros.
En esa misma elección, merece mención aparte la grieta que abrió Movimiento Ciudadano. Sin alianza, MC gana la gubernatura de Nuevo León, dejando a Morena hasta el cuarto lugar de las votaciones. Igualmente, obtiene el triunfo en Monterrey y Guadalajara, dos de las capitales más grandes e industrializadas del país.
Con este panorama electoral, podríamos adelantar tres claves para la próxima elección en donde se elegirán gobernadores de los estados de Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas:
Primera. El presidente seguirá presente, de una forma u otra, en cada una de las elecciones, más cuando en abril se celebrará la denominada revocación de mandato. A mi parecer, pondrá especial atención en Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas, en ese orden.
Segunda. Morena continúa siendo el partido a vencer, centrando su estrategia en la popularidad del presidente. La oposición, por su parte, confía en la suma algebraica de la intención de voto a favor del PRI, PAN y PRD para competir en cuatro estados. Movimiento Ciudadano vuelve a rechazar la alianza, y se presenta con sus propios candidatos, la mayoría surgidos de las filas de sus adversarios.
Tercera. Las primeras encuestas revelan dificultades para Morena en Aguascalientes y Durango, en donde, según un sondeo presentado por El Financiero en esta semana, la alianza “Va por México” registra la mayoría de las preferencias. Al mismo tiempo, la encuesta revela elecciones competidas en Hidalgo y Tamaulipas, el primero ligeramente a favor de Morena y el segundo con una pequeña ventaja de la alianza. En Oaxaca y Quintana Roo, sólo un milagro lograría arrebatar el triunfo a Morena.
En resumidas cuentas, el penúltimo ciclo electoral previo al proceso de 2024 (en 2023 estarán en juego Coahuila y el Estado de México), nos presenta de nueva cuenta dos incógnitas, las cuales no conoceremos hasta la noche de las elecciones: ¿la popularidad del presidente permitirá a Morena ganar la mayoría de las gubernaturas? Y, ¿la oposición tendrá la capacidad para abrir nuevas grietas al régimen?
Autor
Otros artículos del mismo autor
- SALTILLO22 noviembre, 2024Premia Municipio la protección al medio ambiente
- ENCABEZADO22 noviembre, 2024Presenta Chema Fraustro programa Alerta y Segura
- COAHUILA22 noviembre, 2024Firme la Academia Interamericana de los Derechos Humanos de la UAdeC en su Labor Académica y de Compromiso Colectivo
- TECNOLOGÍA22 noviembre, 2024Principales Características a Buscar en un Software de Gestión de Riesgos