LA PAZ EN LO LOCAL

En la semana está entrando a su etapa final el programa de círculos de paz y resolución alternativa de conflictos, una estrategia que surgió de la iniciativa de Liliana Salinas Valdés, desde el DIF Municipal, y de Miriam Cárdenas Cantú, cuando presidía el Tribunal Superior de Justicia, y que con acierto se continuó en la gestión que ahora encabeza Miguel Mery.

Una de las principales líneas de acción de esta estrategia se enfocó a los planteles escolares, pues se consideró fundamental dotar a los estudiantes de habilidades o herramientas que no les da un programa académico regular, y que tiene que ver con cambiar la arraigada creencia o costumbre de recurrir a la violencia o la agresión para resolver las diferencias.

La estrategia es sin embargo más amplia, y en forma simultánea se enfoca también a la comunidad en general para promover los medios alternos de solución de conflictos, con el doble propósito de evitar una saturación en juzgados y tribunales, pero también para disminuir el desgaste emocional de los involucrados en un problema.

La construcción de la paz desde la esfera doméstica es un esfuerzo internacional que se ha adoptado con éxito en Saltillo, replicando modelos en que se apuesta al mejoramiento de las relaciones interpersonales, creando un efecto no únicamente en la solución de conflictos, sino además avanzando hacia la prevención de los mismos, y el crecimiento de la participación social en los retos comunitarios.

El DIF Municipal, el Poder Judicial, y otras instancias como la Fiscalía del Estado y la Secretaría de Educación han sumado a asociaciones civiles e instituciones educativas del sector privado en este esfuerzo que se ha traducido en foros, congresos y talleres para sensibilizar sobre la justicia alternativa y la cultura de la paz.

Los cursos y talleres han ido dirigidos también a maestros y educadores, con el propósito de que ellos se conviertan en difusores de este esfuerzo, que lo repliquen en su actividad diaria, y sean también facilitadores en su entorno de la solución amigable de conflictos.

Ser parte del antecedente de que la familia es el espacio fundamental para la socialización y el desarrollo humano, y sin embargo es dentro del seno familiar donde surgen los primeros conflictos, que tradicionalmente se enfrentan con gritos o hasta golpes, y en el menor de los casos con diálogo.

Las estadísticas nacionales indican que en uno de cada cuatro hogares hay violencia; 67% de las mujeres padecen violencia; de los niños en situación de calle, el 45% fue maltratado en casa.

No es un secreto, a partir del confinamiento creció la incidencia de este tipo de situaciones. En particular en Coahuila ya teníamos muy graves problemas de violencia intrafamiliar, destacadamente los que tienen como víctimas a las mujeres.

En una realidad así, la pertinencia de estrategias como las que se han llevado en Saltillo, es mayor y hay que multiplicarlas.

Los expertos han identificado las causas principales que detonan los conflictos intrafamiliares, y parecen cosas obvias o sencillas, pero en realidad dejan al descubierto que nuestro modelo educativo y cultural por mucho tiempo no se ocupó de lo fundamental: la educación emocional y de habilidades como la comunicación.

Un diagnóstico del DIF nacional señala que la falta de habilidades de comunicación se observa en conflictos originados por la desconfianza; cuando no expresan sus sentimientos, afectos y necesidades adecuadamente; cuando se malinterpreta o se tienen prejuicios; por la indisposición para aceptar las diferencias o desacuerdos; por desinterés o por indiferencia.

La desconfianza se manifiesta cuando los integrantes de las familias no se sienten seguros para intercambiar ideas, pensamientos o sentimientos con el otro, lo cual va íntimamente relacionado con la falta de expresión de los sentimientos, afectos y necesidades generando como consecuencia una baja autoestima, así como la separación emocional entre los involucrados.

Son tendencias socio-culturales fuertemente arraigadas a las que se hace frente en este programa que se instrumentó en Saltillo, y lo deseable es que la estrategia no se interrumpa a partir de la transición en el gobierno municipal.

edelapena@infonor.com.mx

 

Autor

Eduardo De la Peña de León