Destacan la aplicación del conocimiento básico en productos tecnológicos

 

Ciudad de México.- Investigadoras del Cinvestav coincidieron en que, para transferir el conocimiento de ciencia básica hacia aplicaciones, es necesario un trabajo multidisciplinario, entender los requerimientos del usuario final y un aprendizaje permanente en temas relacionados con propiedad intelectual y patentes.

Esther López Bayghen, Refugio Rodríguez Vázquez y Beatriz Xoconostle Cázares se pronunciaron por crear empresas de base tecnológica vinculadas con la institución, donde los estudiantes puedan comercializar sus descubrimientos a través del desarrollo de productos que resuelvan problemas cotidianos.

Al participar en el seminario “Científicas innovando: la propiedad intelectual, un factor clave”, Esther López Bayghen, adscrita al Departamento de Toxicología, destacó que los científicos y sus estudiantes deben ver a la investigación científica como una herramienta para solucionar diversas necesidades sociales, mediante un trabajo conjunto con las empresas, con el objetivo de generar algo diferente e innovador.

Lograr una vinculación entre investigadores, empresas y gobierno requiere entender el proceso de costo-beneficio en el desarrollo de un producto, porque se puede tener una idea brillante, suficiencia en la solución del problema y buena capacidad para implementarlo, pero si su precio final es impagable por el usuario, no es factible. “Generar una nueva tecnología implica considerar todos sus aspectos sociales, económicos, funcionales o de logística”, señaló.

Esther López, quien mediante el diagnóstico molecular ha diseñado tecnologías en la reproducción humana asistida, creación de vaginas artificiales, regeneración endometrial y aplicaciones dermoestéticas, afirmó que algunas empresas no solo buscan aplicar nuevas soluciones, también requieren presencia en la investigación y aprender a hacer medicina basada en evidencia, lo cual obliga a los científicos a trabajar en equipos multidisciplinarios, con el objetivo de entender asuntos administrativos, de patentes o hasta de marketing.

De acuerdo con Beatriz Xoconostle Cázares, investigadora del Departamento de Biotecnología y Bioingeniería, al generar un invento se debe tomar en cuenta su cadena de valor, desde la concepción hasta su llegada al consumidor, por ello es necesario establecer un vínculo equilibrado entre academia e industria, en un trabajo conjunto para obtener productos exitosos.

Xoconostle Cázares, quien se ha concentrado en mejorar diversas variedades de plantas, cítricos y café resistentes a plagas herbicidas o con mayor diversidad genética, consideró que hace falta posicionar a la biotecnología nacional como una buena opción para atender necesidades del campo, porque de ninguna manera tiene baja calidad.

En su oportunidad, Refugio Rodríguez Vázquez, investigadora del Departamento de Biotecnología y Bioingeniería, destacó que otra forma de transmitir el conocimiento generado en los laboratorios es a través de la creación de propuestas tecnológicas, por lo cual es necesario brindar mayor apoyo al desarrollo de la protección intelectual.

Subrayó que la difusión de las soluciones tecnológicas, a través de los medios de comunicación, permite el acercamiento de las ideas a la sociedad y su llegada al mercado para beneficio de las personas.

La creadora de métodos para limpiar suelos y agua contaminados con materia orgánica o metales, aplicados en la exrefinería 18 de Marzo o en el rescate de las chinampas de Xochimilco, explicó que otra forma de transmitir el conocimiento científico es a través del desarrollo tecnológico el cual trae beneficios a la sociedad. (CINVESTAV)