DE BUENA FUENTE

QUO VADIS

¿Que harán Chema Frausto, Jericó Abramo Masso y Jaime Bueno ahora que se aprobó la reelección para alcaldes en Coahuila?

¿Le conviene a Manolo Jiménez otro periodo como edil al frente del ayuntamiento sarapero?

En el caso de Chema Frausto, su salida de la secretaria de Gobierno estaba ya cantada desde hace varios meses, y su posible destino es una diputación federal.

La legislatura federal es también un lugar seguro para el secretario de Vivienda y Ordenamiento Territorial, Jerico Abramo Masso.

Aunque al funcionario estatal aun se le mueve una patita, pues puede contender por el ayuntamiento saltillense por otro partido político.

En el caso del legislador local Jaime Bueno, se anticipa su inclusión en el gabinete estatal, posiblemente el lugar de Francisco Saracho Navarro, secretario de Bienestar Social.

Los tres personajes políticos tienen su futuro en manos del alcalde capitalino Manolo Jimenez, y su decisión de ir por la reelección o dejar la silla municipal vacía.

Y es que aunque parece fácil, el tema es peliagudo, pues el edil sarapero puede jugar a la segura y mantenerse al frente de la comuna capitalina.

También puede continuar con las visitas privadas a las distintas regiones de la entidad y sostener reuniones informales con las fuerzas vivas de cada población.

El otro escenario es sumarse al gobierno estatal, para tener mayor movilidad, sin el ojo vigilante de los opositores, que documentan sus incursiones al interior de la entidad.

Hoy se comprueba la máxima de que la política es de circunstancias.

 

SIGUE LA MATA DANDO

Algo malo, muy malo pasa en una importante universidad de Monclova, de la que recientemente dieron de baja a un honesto tesorero por no prestarse a aceptar el hurto de 10 millones de pesos de las arcas estudiantiles.

El rector de la casa de estudios, de apellido Oyervides,- ¿donde he oído ese apellido?- solicitó hace unas semanas al joven tesorero su firma, para retirar la millonaria cantidad, sin precisar su futuro uso.

Ante la negativa, el rector ordeno su baja y lo despidió sin la terminación legal, y amenazó con llevarlo a la cárcel en caso de denunciar el intento de fraude.

Por fortuna el honesto ex tesorero tiene importantes conexiones en la capital del estado, y ya se evitó que el tal Oyervides cumpla con su amenaza de llevarlo a prisión.

Ese apellido anda a rastras, sobre todo en temas de honorabilidad..

 

 

 

 

Autor

Ulises Salas
Columnista
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