Medio centenar de estanquillos que están dentro de las diferentes escuelas y facultades de la Universidad Autónoma de Coahuila sufren las consecuencias de la contingencia sanitaria al permanecer más de medio año cerrados, debido a las clases virtuales que mantienen sin alumnos los corredores de esta institución.
Marcelo Lara subdirector administrativo de la Oficialía Mayor dijo que se mantiene un contrato de arrendamiento con cada uno de estas tienditas que está suspendido temporalmente hasta que regresen a las actividades presenciales.
Como se recordará algunos de estos estanquillos han permanecido en servicios por décadas como los del Ateneo Fuente, o en Campo Redondo y donde igual se vende a los estudiantes frituras y refrescos que almuerzos o comidas.
“En efecto la UAdeC proporciona espacios para alimentos en espacios arrendados, pero desde marzo con la pandemia se les pidió que dejaran de vender”, explicó.
Señaló que aún no se tiene fecha definida de un regreso a clases presencial pero que ya se entabló pláticas con los dueños de estanquillos para que generen protocolos sanitarios al volver a abrir.
“Si se han afectado en su economía por lo que se ha suspendido el contrato de cobro de renta hasta que vuelvan a activarse”, dijo.
Detalló que tan sólo en la Unidad Saltillo se cuenta con seis puestos en Campo Redondo, ocho en el Ateneo Fuente y cuatro en el campus Arteaga, más los que tiene cada una de las escuelas en cada región.
Algunos de estos puestos vivían prácticamente de lo que se generaba en la venta del día gracias a los miles d estudiantes que aprovechaban las horas libres para comprar en los estanquillos. (INFONOR)
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