Para contrarrestar abandono y situación de calle en perros
Al estimar que en Saltillo existen alrededor de 70 mil perros en situación de calle, la asociación civil «Alianza por los Derechos de los Animales en Coahuila (ADAC)» buscará ante dependencias, como la Secretaría de Salud y Secretaría del Medio Ambiente, oficializar la figura de «animal de apoyo emocional» que abonará a la colocación en hogares –en propiedad de personas que padezcan de alguna enfermedad o que sobrelleven cuadros de depresión o problemas emocionales– de perros abandonados.
Al respecto, Alma Ibeth Salinas Barrón, integrante de «ADAC» señaló que se encuentra trabajando en la generación de un proyecto con el cual pueda comprobar la utilidad médica de contar con la compañía de mascotas, para su posterior presentación ante las citadas secretarías.
«Hemos encontrado que los animales están haciendo una función muy especial con los humanos, dándoles el apoyo que a veces entre los propios humanos no nos podemos dar cuando entran las crisis de ansiedad, de depresión, de llorar. Los perros e incluso gatos están dándonos un servicio que no nos lo podría dar un medicamento, un médico o un psicólogo porque es diferente. Estamos encontrando que hay animalitos con sensibilidad hacia el humano de percibir tristeza e incluso, cuando apenas los conocen, perciben ese problema e inmediatamente quieren ayudar acompañando y dando cariño», explicó para El Heraldo, Alma Ibeth Salinas Barrón.
«Todo esto ha estado funcionando muy bien para personas que tienen algún problema, sobre todo emocional. Investigando sobre los animales de apoyo emocional, resulta que aún no se pueden registrar como un perro que guía a un ciego o que acompaña a una persona con problemas de azúcar. No hay un registro para que los dejen entrar a, por ejemplo, centros comerciales y restaurantes por lo que estamos buscando la manera de que la mascota de apoyo emocional se pueda registrar, se pueda reconocer», agregó.
Asimismo, esperó que, de concretarse esta intención, pueda servir a futuro como una alternativa para centros de control canino donde en lugar de ultimar a los canes que lleguen a sus instalaciones puedan canalizarlos a centros médicos y domicilios donde se requiera un «animal de apoyo emocional».
«Es importante reconocer que los animales son seres que sienten, que sufren, que sienten dolor, que también tiene alegría y tanto que están haciendo una labor fabulosa como animales de apoyo emocional. El exterminio de perros no ha sido la respuesta porque el nivel de perros en la calle no ha bajado», señaló. (OMAR SOTO / EL HERALDO)
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