La otra epidemia que hace a México y EU especialmente vulnerables frente al coronavirus

 (Xinhua/David de la Paz) (dp) (ce)

No solo los adultos mayores, en México y Estados Unidos hay enfermedades extendidas que hacen de quienes las sufren otro grupo vulnerable muy a tener en cuenta en la actual pandemia del coronavirus.

«Literalmente, el sobrepeso nos pesa, la obesidad nos pesa poblacionalmente y hoy enfrentamos una epidemia de covid-19 con estos estragos prolongados de la mala alimentación», reconoció este sábado el subsecretario de Salud mexicano, Hugo López-Gatell.

En efecto, junto a EE.UU., México tiene el dudoso honor de estar en lo más alto del ranking mundial de países con la mayor tasa de obesidad entre adultos.

Y este factor de riesgo, estrechamente ligado a enfermedades como diabetes o hipertensión, ha sido confirmado por expertos como el caldo de cultivo perfecto para disminuir la resistencia de quienes lo padecen frente al coronavirus, publicó BBC NEWS en su sitio web.

Las cifras hablan por sí solas. De las muertes confirmadas oficialmente por coronavirus hasta este domingo (más de 9 mil en EE.UU. y 94 en México, a donde el virus llegó cinco semanas más tarde) un número considerable de las víctimas eran obesas o tenían afecciones relacionadas.

Pero ¿qué es lo que hace la obesidad en el organismo de estas personas para volverlas menos inmunes al covid-19? ¿Y hay algo que puedan hacer para compensar esa mayor vulnerabilidad?

 

LÍDERES EN EL MUNDO

Con más del 30% de sus poblaciones afectadas, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) sitúa a EE.UU. y México en primer y segundo lugar del mundo en cuanto a su tasa de obesidad, es decir, de personas con un índice de masa corporal (IMC) superior a 30.

Pero si sumamos a las personas con sobrepeso (IMC mayor a 25), las cifras son aún más alarmantes: en México estaríamos hablando del 75,2% de la población, según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición de 2018.

EE.UU, por su parte, alcanzó un nivel histórico de obesidad al concentrar tasas de obesidad superiores al 35% en nueve de sus estados, según un informe presentado el año pasado por la organización de políticas sanitarias Trust for America’s Health.

Conscientes de esta realidad, las autoridades sanitarias de ambos países levantaron la alarma casi desde el inicio de la crisis del coronavirus.

«Tenemos una población con una salud crónicamente deteriorada, la magnitud de la epidemia de obesidad, de sobrepeso, de diabetes y con ellas un conjunto de enfermedades crónicas como la hipertensión, que están asociadas con las mismas causas nos pesa», dijo el subsecretario López-Gatell.

«México, a diferencia de otros países, tiene una altísima tasa de diabetes mellitus tipo 2, una tasa de obesidad que está asociada con hipertensión, con problemas respiratorios (…) entonces podríamos ver más casos aquí por esa razón», coincidió el representante de OPS/OMS en México, Cristian Morales.

También los Centros para la Prevención y Control de Enfermedades estadounidenses (CDC, por sus siglas en inglés) incluyeron a las personas con obesidad severa (IMC de 40 o superior) entre los grupos con más riesgo ante el covid-19.

No se equivocaron en sus predicciones. De los cerca de 100 fallecidos en México hasta el domingo, más del 35% vivía con obesidad, hipertensión o diabetes. Un gran número tenía dos o incluso tres comorbilidades asociadas.

En EE.UU., por su parte, el coronavirus ha sido mucho más letal en Nueva Orleans, donde se registra una tasa de muertes dos veces superior a la de Nueva York según destacó la agencia Reuters. Y los especialistas también apuntan a la obesidad de la ciudad de Luisiana como explicación.

 

¿CÓMO LES AFECTA EL COVID-19?

«Es definitivamente preocupante el hecho de que pacientes con obesidad estén en mayor riesgo de tener complicaciones por infecciones de covid-19», le dice a BBC Mundo Salim Virani, profesor de la Escuela de Medicina de Baylor en Houston, EE.UU.

La obesidad provoca un estado de inflamación crónica. Esto afecta al funcionamiento de las células del cuerpo y de sus superficies mucosas, que ven interrumpida su función de barrera protectora natural y facilitan el ataque de virus como el covid-19.

Pero también tiene efectos negativos sobre el sistema inmune, como la disminución en la producción de proteínas vitales para defender al cuerpo contra posibles infecciones. (BBC MUNDO)