¿Cómo deberá ser la gestión de residuos durante la pandemia del coronavirus?

 (Xinhua/Ding Ting) (jg) (rtg) 

Los Gobiernos deben de considerar como un servicio público urgente y básico la gestión de los residuos médicos, peligrosos y domésticos durante la actual pandemia del COVID-19.

El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente destaca que durante el actual brote de coronavirus COVID-19 se produce una gran cantidad de desechos como guantes, mascarillas o materiales de protección infectados, entre otros.

El manejo seguro de esos desechos biomédicos y sanitarios es esencial para la salud comunitaria y la integridad del medio ambiente.

Por el contrario, el manejo incorrecto de tal volumen de productos puede llegar a ocasionar «un efecto de rebote», tanto en la salud de las personas como al medio ambiente, y de ahí la vital importancia sobre su gestión y disposición final de forma segura como parte de una respuesta de emergencia efectiva.

Además, es importante que se apliquen normas uniformes de protección del medio ambiente y la salud humana en todos los establecimientos de asistencia sanitaria, sean cuales fueren las tecnologías utilizadas para el tratamiento y la eliminación. Esto a su vez garantizará una mayor viabilidad y eficiencia del sector.

La falta de recursos o de experiencia en cuanto a elaboración de normas también pueden ser factores que afecten de manera importante la capacidad de tratar desechos biomédicos y sanitarios.

Manejo de residuos médicos

El Programa de la ONU recuerda que a efectos de un manejo eficaz de desechos biomédicos y sanitarios deben tenerse en cuenta los siguientes factores:

*Generación y minimización

*Separación

*Identificación y clasificación

*Manejo y almacenaje

*Empaque y etiquetado

*Transporte dentro y fuera de los establecimientos de asistencia sanitaria

*Tratamiento

*Eliminación de residuos, incluidas las emisiones

*Salubridad y seguridad ocupacionales; salud pública y ambiental

*Concientización y educación de los interesados y de la comunidad

*Investigaciones sobre tecnologías mejoradas y prácticas benignas para el medio ambiente, y elaboración de las mismas

También destaca la existencia de otros aspectos asociados importantes que incluyen la desinfección, y la protección y capacitación del personal.

Todos esos factores están recogidos en las Directrices técnicas sobre manejo medioambiental racional de los desechos biomédicos y sanitarios de desechos que proporciona el Convenio de Basilea de la ONU. Las autoridades nacionales también pueden encontrar recursos adicionales en la página web del Centro Regional para Asia y el Pacífico del Acuerdo.

Estas directrices están destinadas a cubrir todos estos temas y dar respaldo para el logro de mejores resultados ambientales en el contexto del manejo de desechos biomédicos y sanitarios.

El éxito de las estrategias de manejo de desechos depende invariablemente de que se tengan en cuenta, ante todo, los procesos que hayan generado los desechos, y de una adecuada interrelación con los mismos.

Gestión de desechos domésticos

En cuanto a los desechos que se generan en el ámbito del hogar, aunque los guantes, las mascarillas o los medicamentos caducados pueden llegar a mezclarse con la basura doméstica, deberían separarse «y ser recolectados por operadores municipales u operadores de gestión de residuos especializados».

El Secretario Ejecutivo de los Convenios de Basilea, Rotterdam y Estocolmo, Rolph Payet, llamó a todos los sectores de la sociedad a unirse para derrotar al virus y reducir su impacto humano y económico alrededor del planeta.

«Al abordar este desafío enorme y sin precedentes, insto a los responsables de la toma de decisiones en todos los niveles, internacional, nacional, municipal, urbano y distrital, a que hagan todo lo posible para que la gestión de residuos, incluidas las fuentes médicas y domésticas, sea una prioridad y se garantice el mínimo impacto de estos flujos de residuos potencialmente peligrosos sobre la salud humana y el medio ambiente», señaló Payet.

Sobre el Convenio de Basilea

El Convenio de Basilea sobre el control de los movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y su eliminación es el acuerdo ambiental internacional más completo sobre desechos peligrosos y otros desechos, y es casi universal, ya que cuenta con 187 Partes. Con el objetivo general de proteger la salud humana y el medio ambiente contra los efectos adversos de los desechos peligrosos y otros desechos, su alcance abarca una amplia gama de residuos definidos como «peligrosos» en función de su origen y/o composición y características, así como dos tipos de residuos definidos como «otros desechos»: desechos domésticos y cenizas de incineradores.

La Secretaría de los Convenios de Basilea, Rotterdam y Estocolmo alberga los tres principales acuerdos ambientales multilaterales que rigen los productos químicos peligrosos y los desechos, a fin de proteger la salud humana y el medio ambiente. (ONU NOTICIAS)

 

 

 

 

Autor

Agencias