Representantes del sector productivo de Coahuila consideraron como injusto que el Gobierno Federal haya dado el carácter de Emergencia Nacional, y no de contingencia sanitaria, a la etapa actual de suspensión de actividades por causa del Coronavirus, dado que con ello ha dejado la responsabilidad total de asumir el costo económico a los empresarios.
El Presidente de la Cámara de la Industria de la Transformación en la Región Sureste de Coahuila, José Antonio Lazcano Ponce; y el Presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Saltillo, Eduardo Dávila Aguirre, coincidieron en lo anterior, y en señalar que no se tiene aún una contabilización de cuántos de sus socios han asumido ya el cierre de sus negocios a raíz del acuerdo del Consejo de Salubridad General que emitió como obligatoria la suspensión de cualquier actividad productiva no prioritaria, dentro de sus medidas de seguridad sanitaria.
Ambos coincidieron también en que hasta la fecha ni el gobierno federal ni el estatal han informado a sus sectores de planes de apoyo de ningún tipo, pese a que ya les fueron presentadas las necesidades, por lo que urgieron a que se tomen medidas ante el cierre de empresas y el riesgo de pérdida de empleos.
Subrayaron que están de acuerdo en apoyar en esta contingencia, pero es necesario que exista también un plan que ayude a mantener las empresas a flote, por lo que ambos gobiernos federal y estatal deben hacer su parte, y generar fondos emergentes, lo que están haciendo los demás países afectados.
Sin embargo, destacaron que no se puede dejar a los sectores que son obligados al cierre, el asumir el costo de continuar pagando los salarios a sus colaboradores sin tener ingresos en las siguientes semanas y sin realizar actividad alguna que es genere dichos ingresos, por lo que urgieron a que se establezcan medidas de apoyo a ambos sectores, dado que hasta la fecha ni a nivel estatal ni a nivel federal se ha tenido una respuesta a las peticiones hechas por sus representaciones para obtener beneficios fiscales o apoyos de sustentabilidad.
Lazcano Ponce, expuso que se ha dado el carácter de Emergencia Nacional a una situación que se sabe es una Contingencia Sanitaria, para con ello mantener la carga de la situación desde el punto de vista económico de los salarios de los trabajadores, al cien por ciento por parte de los empresarios.
“Cuando yo entiendo que no habría ningún problema por parte de los empresarios por ser solidarios ante el bien común de la sociedad y nuestros trabajadores, de apoyar; pero no todas las empresas tienen la capacidad económica de pagar a todos los trabajadores y enviarlos a sus casas sin ningún ingreso que nos permita solventar eso”.
Indicó que a crisis apenas empieza y el riesgo de despidos está latente, ya que una cosa es querer y otra poder, de ahí que se solicite ya no la eliminación de los impuestos sino el traslado de los mismos y mediante un programa de financiamiento irlos pagando.
Agregó que en el caso de Coahuila hasta ahora no se ha visto nada, lo mismo que a nivel federal en la parte impositiva, “dentro de lo que a mí corresponde como industria de la transformación, probablemente con el sector hotelero y restaurantero, pero el industrial, nada”, expuso respecto a lo que corresponde al Gobierno Estatal.
Por su parte el Presidente de la Canaco Saltillo destacó que el sector está muy afectado, ya que más del 98 por ciento de las ventas han disminuido en los negocios que aún están abiertos y ya se tienen varios cerrados.
“Lo vemos muy preocupante, las acciones del gobierno federal van encaminadas a cerrar los negocios no prioritarios”; indicó que se debe tener un equilibrio entre ingresos y egresos, lo que en estos momentos no existe, lo que pone en riesgo los empleos que genera el sector.
En el caso de Canacintra, el organismo tienen en la Delegación Coahuila afiliadas 475 empresas y éstas representan más de 70 mil empleados; y Canaco Saltillo informó que sólo de socios agremiados se tienen diez mil afiliados, que generan cerca de 65 mil empleos sólo en Saltillo, pero el sector representa 35 mil unidades económicas en la región que significan más de 180 mil empleos; ambos organismos insistieron en que actualmente ya hay riesgo de pérdida de empleos ante una crisis económica que se avecina.
Canaco subrayó que existen tres actores implicados en esta situación: gobierno, trabajadores y empresarios; por lo que es necesario que los tres aporten en la resolución de la problemática. “Hacemos un llamado a la autoridad que tome a responsabilidad que le corresponde, para generar apoyos correspondientes”.
Destacó que aún al sector de comercio, los servicios y el turismo aún no le ha sido notificado ningún apoyo del Gobierno Estatal. (ESMERALDA SÁNCHEZ | INFONOR)
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