Ante las inconsistencias en el acuerdo emitido el 25 de marzo por la Secretaría de Salud federal, las Cámaras empresarial dejaron a sus agremiados la decisión de continuar laborando y a la fecha no hay cierres ante la disposición de suspender actividades no sustantivas, informo Miguel Monroy, director de Coparmex Coahuila.
“El acuerdo la verdad es que deja muchas dudas en cuanto a la interpretación, para empezar, no es una declaración de contingencia NAD Fitosanitaria, que es la figura legal que tiene como consecuencia la suspensión de relaciones colectivas de trabajo; lo estamos tomando de buena fe pero legalmente el acuerdo deja esas dudas”.
Además, la Secretaría de Salud carece de facultades para obligar a los patrones a otorgar permisos con goce de sueldo y la ley federal ya protege a las mujeres en estado de gestación; finalmente no hay claridad respecto a qué actividades productivas del sector privado, involucran la concentración física.
Por ello, y asumiendo la responsabilidad solidaria y la necesidad, el primer compromiso es cubrir todas las prevenciones, medidas y recomendaciones sanitarias para evitar el contagio; el segundo es que las empresas deben de operar tomando en cuenta las medidas de sanidad adicionales, porque el mismo acuerdo en el artículo segundo señala que van a seguir laborando las empresas, negocios y establecimientos mercantiles; y finalmente que están recomendando que a las personas que estén dentro de los grupos vulnerables se envíen a casa.
De ahí que, a la fecha, no se haya procedido al cierre de ninguna empresa y cada departamento de recursos humanos de las empresas han tomado las previsiones necesarias, de ahí que cada empresario debe tomar sus propias decisiones.
“Los que sienten síntomas pueden solicitar una incapacidad, la cual va a ser otorgada dependiendo de los análisis que hagan de la solicitud y se va a considerar eso como un riesgo de trabajo y los enviarán a su casa con 14 días de salario al 60 por ciento”.
En general se está privilegiando el trabajo en casa, se reducen las actividades operativas en donde se pueda hacer esa función a través de cadenas de valor y las logísticas pero cada empresa deberá estar analizando ya que algunas han reducido el volumen de operación y otras han escalonado los tiempos de comida y bajado la densidad del transporte de personal.
“En virtud de que el acuerdo deja dudas de interpretación cada empresa es la que va a tomar la decisión de hasta dónde limita las operaciones y hasta donde va a dejar de trabajar”, puntualizó. (ESMERALDA SÁNCHEZ | INFONOR)
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