RAMOS ARIZPE

Clínica 88 del IMSS en Ramos Arizpe carece de filtros sanitarios y pruebas de laboratorio para detección de COVID-19 e influenza

Por

18 marzo, 2020

Luego de un recorrido por los diferentes nosocomios pertenecientes al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en la ciudad de Ramos Arizpe, quedó de manifiesto que la clínica número 88 ubicada en la calle Salto de Agua en la colonia Manantiales no cuenta con los filtros y medidas de salubridad pertinentes que a nivel federal la secretaria de salud ha sido insistente en colocar para el uso de todo visitante. En el caso de esta Unidad de Medicina Familiar (UMF) no cuenta con gel antibacterial las 24 horas del día, como si ocurre en otras clínicas y hospitales del IMSS.

Un aviso ubicado en la clínica 88 da cuenta además de la inexistencia de pruebas de laboratorio para la detección del COVID-19, mejor conocido como coronavirus, así como también pruebas para la detección de la influenza.

“En este hospital atienden muy mal, yo desde el día de ayer asistí a urgencias ya que mi niña presentaba temperatura y el doctor de urgencias me mando para hoy con mi médico familiar y me dijeron que me pusiera a ver videos de Facebook para ver los síntomas del coronavirus y que no fuera exagerada, además en ningún momento me ofrecieron gel antibacterial” se quejó una madre de familia entrevistada en ese lugar.

“Yo fui a una revisión por mi quinto mes de embarazo y desde mi entrada no se me pregunto si padezco alguna enfermedad respiratoria, tampoco vi que se me ofreciera gel antibacterial. Cuando he visto que en otras clínicas tienen de perdido una persona que te orienta si presentas algún síntoma con eso del coronavirus” explicó una derechohabiente.

“Acudí con mi hijo hoy porque quería estar segura si tenía algún resfriado o catarrito, pero al entrar y que me atendieran no me preguntaron si mi hijo o yo traíamos alguna molestia ya sea dolor de cabeza o cuerpo cortado” expreso otra madre de familia. (EDUARDO SERNA)

UN AVISO UBICADO en la clínica 88 da cuenta de la inexistencia de pruebas de laboratorio para la detección del COVID-19