OPINIÓN

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31 mayo, 2019

Las ominosas señales son soslayadas, y ante la forma de proceder del gobierno federal contra AHMSA y el presidente de su Consejo Directivo, con una contundente violación de garantías y atropello al estado de derecho, aflora algo aún más grave y peligroso: la reacción que como sociedad estamos teniendo.

Antes que alzar la voz por los prepotentes hechos, redes y medios se ceban en el empresario detenido, alimentan el escándalo y ánimo de linchamiento. Acusan, enjuician y condenan. Especulan a ver a quién más salpican.

Las cúpulas empresariales evaden, callan. Temerosas se ocultan, pensando equivocadamente que así se ponen a salvo.

Los actores políticos, salvo honrosas excepciones, con su oportunismo y cálculo característicos rehúyen los reflectores, que con tanto anhelo buscan y hasta arrebatan cuando el tema les acomoda.

Hace ya varios siglos lo escribió el poeta John Donne: «…Ningún hombre es una isla entera por sí mismo… por eso, nunca preguntes por quién doblan las campanas; doblan por ti».

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Lo comentamos la semana anterior. Cuando se leen entre líneas, dicen mucho los comunicados de prensa del gobierno estatal.

Y si señales hay que leer, imposible pasar por alto las que desde el Museo del Desierto se enviaron el martes por la tarde cuando se presentó la ruta turística «Vinos y Dinos».

De ese evento se difundió una foto del momento en que el ex alcalde de Saltillo Rosendo Villarreal Dávila muestra al gobernador Miguel Ángel Riquelme algunos de los vinos que produce su familia en la región.

Rosendo ha sido un actor relevante en Coahuila en los últimos treinta años, y si bien no está activo en la política partidista, en el pasado reciente fue una figura influyente y cercana a su sobrino Isidro López Villarreal, y promotor importante de las agrupaciones que abanderan el combate a la corrupción y particularmente promueven proseguir indagatorias por la deuda de Coahuila.

En la polémica que ha surgido por el desarrollo urbano en Derramadero, y los movimientos en defensa del acuífero del sur de Saltillo, General Cepeda y Parras, se ha dicho que está involucrado Villarreal Dávila.

La expresión corporal de Riquelme y Rosendo en esa foto habla de al menos cortesía, nada de tensión.

El gobernador no compra tan fácil pleitos ajenos, y en el propio lanzamiento de esa estrategia de promoción envía otro mensaje: reconoce el potencial productivo y turístico de la zona y medirá muy bien antes de condenar a los vinos al mismo destino que los dinos, la extinción.

Y en una más de boletines. Sutil pero sugerente la mención a Manolo Jiménez acompañando al gobernador en un evento en los Cinco Manantiales, concretamente en Morelos. Y más que la mención, para tenerse en cuenta la presencia del alcalde de Saltillo en otras regiones.

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Si no fuera patético daría risa. Treinta y cinco meses se tardó la Comisión de Derechos Humanos en emitir una recomendación por la queja que en julio de 2016 el representante de los trabajadores del Hospital General de Torreón, porque no tuvo respuesta en su petición al entonces gobernador Rubén Moreira para que se dotara al nosocomio de los insumos y personal suficiente para su operación.

En recomendación emitida el 20 de mayo y dada a conocer el miércoles de esta semana, dispone la Comisión en el primer punto que en «forma inmediata» se responda a peticiones formuladas desde el 28 de septiembre de 2015…

Así de rápido actúa la Comisión en temas tan importantes como la salud pública. ¿No fuera a ser que proceder con oportunidad dañara la ya de por sí deteriorada salud política de Xavier Diez de Urdanivia?

Penosa manera de terminar con una carrera en el servicio público.

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Desde Sabinas un lector de este Índice replica al comentario de la semana anterior sobre la poca relación que en realidad tiene con Coahuila el doctor José Narro Robles, con todo y ser saltillense de origen.

No es lo importante dónde hizo su carrera académica y política, sostiene, sino cómo la hizo, cómo vive, cómo piensa, cómo actúa. «La identidad con los auténticos priistas no está en algo circunstancial como el lugar de nacimiento, sino en la capacidad, los valores y los principios. La idoneidad para reconstruir al PRI como una oposición digna, y no condenarlo al triste papel de partidito bisagra, como lo ha sido el Verde Ecologista».

Duro.

Y duras han sido algunas reacciones por el contundente y abierto respaldo de los gobernadores priistas a la aspiración de Alejandro Moreno, contrincante del Doctor Narro.

Dueños de la estructura y el presupuesto, o lo que quede de ambos en sus estados, y liberados de la línea presidencial, los gobernadores tienen en sus manos la renovación de la dirigencia del PRI y ya definieron cómo quieren resolverla.

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Interesante será conocer los resultados de las elecciones de este domingo, particularmente en los municipios de Durango que forman parte de la Comarca Lagunera. ¿Derrotará MORENA, con todo y las fricciones en la designación de candidatos, a las otrora invencibles cartas del PRI? Habrá que ver, y leer con cuidado, pues por acá tendremos elecciones en un año.