OPINIÓN

MIENTRAS AGONIZO

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21 abril, 2019

Imagina que la protagonista, Addie Bundren está a punto de morir, mientras escucha serruchar la madera con la cual harán su propio ataúd.. Ella sabe que su fin se acerca, por eso solicitó el féretro a su medida y deseo. También pidió que la llevaran a donde están los suyos, en Jefferson. A través de varios monólogos interiores conocemos el resto de su familia, y los pormenores en torno a su futura muerte. Mientras agoniza Addie, la vemos convertirse en una mujer con delgadez extrema, en su traslado a Jefferson, también somos testigos de su muerte y de su entierro.

La majestuosa novela Mientras agonizo, del Nobel William Faulkner, nos muestra la subjetividad de los personajes narrada desde distintos puntos de vista. Son varias voces presentes en esta obra. Cada personalidad es diferente y en conjunto representan la clase social baja norteamericana.. Se trata de una voz de los que no tienen voz, ni herencia; de los pobres que pueden convertirse en héroes o en villanos.

Las voces de los personajes son ensimismadas, en especial la de la familia de Addie. Casi toda la historia versa sobre ellos. Es una narración ágil, en la que se escuchan otros participantes de esta narración. En Mientras agonizo, las voces son muchas y totalmente diferenciadas.

La voz más destacada es la de Addie, a pesar de que tiene pocos diálogos. Ella poseé una frágil figura y una fortaleza inaudita para esperar el fin. Nos lleva a saber de su vida a través de sus pensamientos. Se siente atrapada, sin vida propia y sin el cobijo de un Dios. No le da valor a las palabras, disfruta de su soledad.. Considera que lo importante en la vida es prepararse para la muerte.

Es un relato catastrófico en el que la institución familiar se refleja con infidelidades, locura y falta de esperanza. Me admiró la fortaleza de esta mujer, y cómo fue manejando con frialdad los detalles de su partida. Sin embargo, me pareció totalmente verosímil la historia con todos sus ambientes y personajes. Leéla o reléela, te encantará, verás que me quedo corta y que te atraparán sus páginas.