París.- El caso de una mujer víctima de violencia intrafamiliar causó una ola de indignación en Francia, debido a que los seguros obligados a pagarle una indemnización la declararon responsable por los daños que sufrió.
Aïda, como se le conoce, es originaria de la ciudad norteña de Le Mans, y mantiene su identidad oculta por razones de seguridad. En 2013 la joven de entonces 26 años tenía tiempo de vivir en una relación violenta con su pareja, hombre a quien había denunciado varias veces por violencia intrafamiliar.
Cimac Noticias publicó en su sitio web que la noche del 24 de agosto de 2013 la policía intervino en el domicilio de la pareja tras una disputa. Según el periódico “Le Maine”, primero en reportar sobre el caso, los policías pidieron a la joven abandonar la vivienda, por su seguridad. Aïda aceptó y quiso ir a la casa de sus padres, en Alençon, a unos 50 kilómetros de distancia. Pero no lo hizo porque era de noche, ya no había trenes y no tenía los medios para pagar un taxi.
Esa noche intentó llamar a un número de emergencia, que atiende casos de violencia, para obtener alojamiento pero no obtuvo respuesta. Las amistadades a las que pidió ayuda tampoco respondieron. Ante la alternativa de dormir en la calle, optó por volver a casa, pensando que su pareja se habría calmado, pero no fue así.
A las 3.30 de la madrugada, gente vecina del edificio llamó de nuevo a la policía. La policía encontró a Aïda fuera del inmueble, en el suelo. Su pareja la había tirado por la ventana del tercer piso. La mujer quedó parapléjica.
En junio 2016, relata “Le Maine”, su agresor fue condenado a 15 años de prisión. Aïda y su abogada pidieron, como le corresponde según la ley francesa, una indemnización de un fondo para víctimas de violencia. Con la reparación del daño querían invertir 90 mil euros (aproximadamente dos millones de pesos mexicanos) en la adaptación de un auto y de su casa acorde a su discapacidad, y solventar gastos de transporte. Pero el seguro se negó.
El seguro ofreció solo una indemnización parcial al considerar que “hay una responsabilidad compartida”, ya que Aïda “cometió una falta civil (negligencia o imprudencia) al regresar a su domicilio”, diho uno de los abogados de la joven, al citar la resolución a la agencia France Presse.
Los abogados de la joven apelaron ante dos instancias que confirmaron la decisión del Fondo, ambas declararon una “falta compartida” y bajaron la indemnización que le fue otorgada en un principio.
Desde que los medios cubrieron el caso, la semana pasada, la decisión incitó el debate en Francia. Aïda, en entrevista con la cadena France 2, dijo que no entendía el fallo. “Es como si yo hubiera contribuido, como si hubiera buscado lo que me ha pasado, convertirme en parapléjica de por vida”, declaró.
La responsable de Igualdad del Gobierno francés, Marlène Schiappa, mostró su indignación en redes sociales y prometió intervenir para corregir una decisión “incomprensible”. “Esta decisión va en contra del trabajo que hacemos. Una mujer nunca es responsable por las violencias que sufre”, escribió en Twitter.
Schiappa anunció que su oficina se mantendría informada y en caso de que la situación fuera tal como se ha denunciado, ella intervendría personalmente “ante las instituciones responsables.”
Según datos del Instituto Estadístico Europeo (Eurostat), en 2015, se cometieron 142 casos de feminicidio en Francia. (CIMAC NOTICIAS)
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