Adrenalina en las alturas

Nuevas modalidades deportivas plantean retos desafiantes y llevan la emoción al extremo

Por: Lalo De La Peña López

Con éxito se llevó a cabo el fin de semana anterior, del jueves 13 al domingo 16 de diciembre, la tercera edición del festival Potrero Up High, en el cañón de Potrero Chico, municipio de Hidalgo, Nuevo León.

Este festival presentado por Slackline Monterrey consistió en la instalación de 14 highlines de diferentes longitudes, desde 25 metros hasta 300 metros, y también hubo diferentes talleres de yoga, de seguridad en las highlines, autorescate, instalación de highlines, telas, etcétera.

A este festival acudió gente de todo el mundo, destacando la presencia de deportistas de Francia e Italia, y principalmente de Estados Unidos.

El highline es un deporte de equilibrio, el cual consiste en instalar una cuerda de nailon de dos puntos, a alta altura, y se tensa.

Después el deportista con un arnés y una correa de protección se ancla a la cuerda y procede a caminar hacia adelante y hacia atrás en la cuerda. A medida que se perfecciona la técnica también se pueden dar saltos y piruetas en la misma cuerda. También hay gente la cual toca instrumentos en medio de la highline o que hace malabares.

El festival coincidió con la temporada de escalada en roca de Potrero por lo cual los escaladores también pudieron presenciar el increíble espectáculo que se llevó a cabo en el cañón.

El festival contó con la presencia de Friedi K ühne, un atleta que mantiene el récord a nivel mundial de free solo en highline, esto implica pasar una highline sin equipo de protección. El atleta alemán alcanzó este record en 2017 al cruzar una cuerda de 110 metros de longitud sin ningún tipo de protección.