Madrid.- El Real Madrid afronta este miércoles su partido de semifinales del Mundial de Clubes en un choque ante el equipo japonés Kashima Antlers con muchas dudas en su juego en un encuentro que intentará ganar para pasar a la final y buscar su tercer título consecutivo.
El vencedor de esta semifinal se verá con el Al Ain emiratí, que juega la competición por ser anfitrión, y que dio la gran sorpresa al eliminar el martes, en la tanda de penaltis (5-4), al argentino River Plate, tras acabar el tiempo reglamentario y la posterior prórroga igualada (2-2), siendo el primer finalista del Mundial de Clubes que se disputa en Abu Dabi (Emiratos Árabes).
Pero en realidad el River Plate, campeón de la Copa Libertadores hace apenas nueve días, estrenó el martes su título de la peor manera con una inesperada eliminación en semifinales del Mundial de Clubes al caer eliminado por el Al Ain, dice el rotativo As.
Por otra parte, desde Europa se ve el duelo entre el Real Madrid y el Kashima Antlers como un simple trámite para los blancos, favoritos en el torneo, pero recordando el precedente de 2016 cuando el equipo madridista se impuso a los nipones en la prórroga. En esta semifinal se tiene en cuenta que con el mal momento del juego del Madrid todo puede ocurrir al igual que con la sorprendente derrota del River Plate argentino.
El Real Madrid no lo tendrá fácil, dice el diario As, y recuerda cómo los nipones en 2016 lograron incluso forzar la prórroga tras adelantarse 0-2 aunque Cristiano Ronaldo decidió en el alargue, pero los japoneses tienen ganas de revancha ya que se sienten más fuertes tras levantar por primera vez en su historia la Liga de Campeones asiática.
El técnico madridista, el argentino Santiago Solari, no ha ocultado su admiración por este Mundial de Clubes. «Me encanta este torneo y que permita que los campeones de cada confederación luchan por el título de campeón del mundo. Le damos la máxima importancia porque el camino para llegar aquí es muy duro. Vamos a intentar revalidar el título», explicó.
«Respeto al máximo a todos los rivales. Cuando tenía 13 años me escapaba del colegio para ver estos partidos cuando era la Intercontinental. Veía al Milán, al Sao Paulo, entre otros, ahora el formato es más democrático y más complicado. No voy a subestimar a ningún rival», señaló Solari en su rueda de prensa previa al partido de este miércoles.
El técnico argentino, que ironizó diciendo que han pasado «rápido» sus dos primeros meses en el cargo (nueve triunfos en 11 partidos), tiene varios futbolistas con problemas físicos.
Uno de ellos es el galés Bale, decisivo en varias de las finales que ha jugado como madridista, así como Asensio y Varane, que no han podido completar los entrenamientos. Parece que el Madrid podrá contar con Benzema y Casemiro, recuperado de su esguince aunque podría seguir Marcos Llorente en el once titular.
«Queremos ganar el tercer mundial consecutivo. El mérito es la unión que tenemos en el vestuario, la base del equipo lleva tiempo junto y eso nos ha ayudado a llegar donde hemos llegado», resaltó el brasileño Marcelo, uno de los capitanes del equipo. (XINHUA)
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