Miriam Celaya, la migrante hondureña que ha sido víctima de acoso y amenazas de muerte en México por rechazar un plato de frijoles en Tijuana, ya fue ubicada por su familia en un albergue —donde se refugió para proteger su vida y la de sus dos hijas pequeñas— luego de que su familia reportó su desaparición.
El área de Comunicación Social del Instituto Nacional de Migración confirmó al HuffPost México que Miriam Celaya y sus dos hijas –una de ella sordomuda—se encuentran a salvo en la frontera norte, pero que se encuentran resguardadas ante el temor de que alguien atente contra ellas. Su ubicación exacta no fue revelada por motivos de seguridad.
Líderes de la caravana migrante que están en contacto con las tres hondureñas, quienes pidieron no ser identificados para no poner en riesgo a las migrantes, aseguraron que la familia sufre un intenso desgaste emocional, tras intentos de agresiones físicas en Tijuana por parte de mexicanos.
«La niña, la de 11 años, es la más afectada de todas. Duerme poco, come poco, está muy nerviosa todo el tiempo, igual que la mamá», comentó un activista. «Es impresionante ver la violencia psicológica que han sufrido solo por rechazar un plato de frijoles, algo por lo que, además, ya pidieron perdón, como si hubieran cometido un delito».
Por otro lado, la agencia internacional de protección a la infancia UNICEF aseguró que buscará a Miriam Celaya y sus hijas para ofrecerles acompañamiento con la procuraduría local de protección a infantes y facilitar su entrada a un mecanismo de protección que las ponga a salvo de cualquier agresión.
El 24 de noviembre pasado, la hermana de Miriam Celaya, Mirna Celaya, publicó un video en redes sociales, que envió al HuffPost México, para denunciar que su hermana llevaba cuatro días sin comunicarse con ella ni su papá, un comportamiento inusual en Miriam. Ella informaba con frecuencia a su familia su ruta por México hacia Estados Unidos, a donde deseaba llegar para conseguirle a su hija un tratamiento médico inexistente en Honduras.
La preocupación de la familia se vio agravada por las amenazas de muerte que en aquellos días recibió Miriam Celaya, y sus hijas, después de que se hizo viral el fragmento de 21 segundos de una entrevista en video entre ella y el periodista Aitor Saez de la cadena alemana Deutsche Welle sobre la caravana migrante.
«Mira lo que están dando: puros frijoles molidos, como si le estuvieran dando de comer a los chanchos», dijo Miriam Celaya en la grabación, provocando una ola de indignación y acoso, que no paró ni cuando publicó un video ofreciendo disculpas.
En redes sociales, Miriam Celaya recibió todo tipo de amenazas: desde quienes le dijeron que la dejarían morir de hambre, y a sus hijas, como escarmiento por rechazar los frijoles mexicanos hasta los que aseguraron que darían sus datos a los cárteles de la droga en Tijuana para que las mataran por «malagradecidas».
«De corazón, les pido mil disculpas por todo lo que está sucediendo. Y mi hermana les pidió disculpas y, por favor, tóquense el corazón. Todos somos seres humanos, todos cometemos errores. Lo importante es que ella rectificó y pidió perdón…», dijo Mirna Celaya en el video en que pedía informes sobre el paradero de su familia. «Quiero pedirle a los mexicanos que tóquense el corazón, tengan compasión de mi hermana». (THE HUFFINGTON POST)
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