En menos de 24 horas y en diferentes puntos de Guanajuato fueron asesinadas 21 personas, siete de ellas en Pénjamo en dos hechos; entre las víctimas se encuentra el hijo de un exalcalde y actualmente funcionario de la Secretaría de Desarrollo Social estatal, publicó Excelsior.
El resto de los homicidios fueron perpetrados en Salamanca, León, San Luis de la Paz, Cortazar, Abasolo, Apaseo el Grande, San Francisco del Rincón y Valle de Santiago.
El próximo 26 de septiembre, Diego Sinhué Rodríguez tomará posesión de la gubernatura guanajuatense, entidad que se encuentra en el segundo puesto de los estados más violentos en lo que va del año (según cifras del SESNSP).
Entre todos los homicidios están los cometidos en Pénjamo, en la comunidad rural de Montebello, la noche de este jueves, cuando un grupo armado se acercó a cinco jóvenes que charlaban en una banqueta para preguntarles sobre el paradero de otra persona y saber si se trataba de uno de ellos; al no responder, les dispararon.
Se informó que entre las víctimas está Jonathan García Muñoz, de 28 años, hijo del exedil y actual funcionario de la Secretaría de Desarrollo Social y Humano estatal, Miguel García Gómez.
Horas más tarde, un grupo armado irrumpió en una vivienda, también en Pénjamo, y disparó contra tres personas, matando a dos de ellas.
En León fueron asesinadas otras tres personas.
En otro hecho, el cuerpo de una víctima —encobijada y con un mensaje de advertencia—apareció en la colonia San Marcos. En el barrio de San Miguel un motociclista recibió varios tiros, mientras que una persona más murió en la colonia Pedregal de Satélite a manos de su hijastro de 19 años.
CRECE INSEGURIDAD
Alvar Cabeza de Vaca, secretario de Seguridad de Guanajuato, reconoció que, a la fecha, bajó el número de elementos de las policías municipales hasta en casi 30 por ciento.
Es decir, de ocho mil 200 a menos de seis mil. Lo mismo en las fuerzas de seguridad de Guanajuato.
«Las policías municipales, insistimos, durante toda la administración; nosotros más o menos contabilizábamos al inicio, en 2012, alrededor de ocho mil municipales, ocho mil 200 para ser exactos, y al cierre de la administración tenemos poco menos de seis mil. Sí han sufrido las policías municipales una baja”, indicó.
El secretario de Seguridad resaltó que todo esto se debe a las pocas garantías que otorgan estos puestos de trabajo, así como a los bajos salarios. Sin embargo, rechazó mencionar la inseguridad como el principal motivo.
En lo que va de este año han sido asesinados 52 policías, cuando en 2017 la cifra fue de 29 homicidios. (EXCELSIOR)
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