OPINIÓN

ALGO QUE VALE LA PENA CONTAR

Por

12 julio, 2018

ALBERTO BOARDMAN

“Hay una quinta dimensión más allá de lo que conoce el hombre. Es una dimensión tan vasta como el espacio y tan eterna como el infinito. Es un lugar al que llamaremos… La Dimensión Desconocida».

Así comenzaban en general, los 156 capítulos de toda una institución en el arte de contar historias, transmitida durante cinco temporadas grabadas entre 1959 y 1964. Rodman Edward Serling, su creador, escribió 92 de esos 156 episodios, apareciendo además en escena para narrar la premisa de cada historia. Rod siempre se caracterizó por ser un gran apasionado de la crítica social, sin embargo en sus inicios sería duramente censurado; entonces se le ocurrió una idea innovadora y creativa: “Las cosas que no pueden ser dichas por un republicano o por un demócrata, pueden ser dichas en cambio, por un marciano”.

De esta ingeniosa forma Serling logró proyectar entre líneas una crítica subliminal en contra del consumismo, la guerra, la naturaleza humana y un sistema político y social, sin que sus detractores pudieran evitarlo. No resultó fácil, para ello tuvo que fundar su propia compañía que le permitió la libertad de escribir sus libretos, y en cuanto a salvar el asunto de los patrocinadores, lo dejó a los fantasmas y marcianos en turno. Existe toda una ideología humanista presente en cada guión de la serie. Aparentemente observamos viajes en el tiempo, un milagro, una fantasía, pero si prestamos atención es fácil detectar la crítica y el reposicionamiento de los valores perdidos. Estamos ante un genial palimpsesto detrás de la obra de ficción, un legado que implica una forma distinta de ver las cosas sin olvidarnos de aquello que existe y no podemos ver, de aquello que acompañará a las personas mientras algo de humanidad quede en ellas: La infinita capacidad de asombro.

Rodman Edward Serling, el primer ciudadano de la dimensión desconocida, en algún lugar entre el espacio y el tiempo, continúa escribiendo una historia sobre usted o sobre mí, invitándonos a abrir esa puerta con la llave de la imaginación. Tras ella, encontraremos otra dimensión, una dimensión de sonido, una dimensión de visión, la dimensión de la mente. Estamos ante un mundo distinto de sueños e ideas, ¿Qué no es posible? Todo es posible en la… Dimensión Desconocida.

Somos lo que hemos leído y esta es, palabra de lector.

radioelitesaltillo@hotmail.com