Por qué voy a votar por Meade

 Francisco J. De La Peña

La respuesta es muy sencilla, y la voy a dividir en tres partes:

Uno, porque no quiero que gane López Obrador

Creo que sería lo peor que le pudiera pasar a México. El Peje, lo he dicho antes, es un hombre caracterizado por cinco atributos, todos los cuales casualmente comienzan con la letra “i”: es una persona ignorante, iracundo, intransigente, improductivo, e inestable.

Intolerante, porque no admite crítica alguna; porque solo su verdad cuenta, y la de todos los demás es mentira. Porque sólo él tiene la razón, siempre, y en cualquier lugar. Porque no tolera que nadie lo cuestione, ni que nadie le lleve la contraria.

Ignorante, porque tardó 18 años en concluir una carrera, y aun así, nadie sabe las mañas y artimañas de las que tuvo que valerse para conseguir un título que además nunca ha mostrado. Porque no es un hombre culto, no sabe otros idiomas, y porque desprecia abiertamente a las personas que saben más que él.

Iracundo, porque siempre está furioso. A dónde quiera que va, se la pasa gritando todo el tiempo, y se la pasa insultando, ofendiendo y menospreciando a todos los que no piensan igual que él. Pide serenidad a los demás, pero él jamás se serena. Y al tomar sus decisiones influido por su estado de ánimo, suele equivocarse la mayoría de las ocasiones.

Improductivo. Nunca ha trabajado, nunca ha pagado impuestos. Y aun así, nadie sabe de qué ha vivido durante todos estos años en que se ha mantenido en una campaña constante, recorriendo una y otra vez el país obsesionado con la idea de ser presidente. Sus hijos se dan la gran vida, viven rodeados de lujos increíbles, pero hasta la fecha, nadie sabe de dónde sale el dinero que gastan a manos llenas.

Inestable. Escucharlo hablar es un martirio. Tiene serias dificultades para pronunciar dos frases seguidas, y cuando lo logra, es frecuente que él mismo se contradiga. Un día afirma una cosa, y al día siguiente lo contrario. Es evidente que sufre algún trastorno mental, además de los muchos males físicos que lo aquejan. Sus seguidores dicen que es por cansancio. Los psicólogos y los psiquiatras, lo ven como un caso digno de estudio.

 

Dos, porque no confío en Ricardo Anaya

Aunque reconozco que Ricardo Anaya es un joven brillante, poseedor de una inteligencia superior al promedio, creo también que es un hombre deshonesto, que consistentemente nos ha mentido a los mexicanos, y que además, para llegar a dónde está, se la ha pasado traicionando a todos los que en algún momento le ayudaron en su meteórica carrera.

Para mí, Anaya es el candidato que más se parece a Carlos Salinas de Gortari. Al igual que éste, ha llegado a lo más alto de su carrera antes de cumplir los 40 años, pero, también al igual que éste, le debe su éxito a su falta absoluta de escrúpulos para traicionar, pisotear y destruir a cualquiera que se interponga en su camino. De esto puedan dar fe el ex Gobernador de Querétaro, Francisco Garrido; el ex Presidente del PAN, Gustavo Madero; y por supuesto, Felipe Calderón y Margarita Zavala.

Además, al igual que Salinas, Anaya es un hombre deshonesto. Ocultó durante mucho tiempo el lujoso tren de vida que se da él y su familia, el monto exacto de sus ingresos, y sobre todo, la fuente de éstos. Abusó de los cargos que ha ocupado, para enriquecerse de forma ilegal, como ha quedado plenamente demostrado. Y ahora pretende que, a cambio de la promesa de encarcelar a Peña Nieto, le perdonemos a él todos sus pecados. ¡Claro que no¡

Si llega a ganar la elección, Anaya pudiera ser un buen presidente, como lo fue en su momento Salinas de Gortari. Pero igual de corrupto y deshonesto que lo fue esto. Por eso no confío en él, y por eso no voy a votar a su favor.

 

Tres, porque Meade es el más preparado

Me queda entonces como opción José Antonio Meade, al cual tuve el gusto de conocer y platicar con él personalmente.

Meade es sin duda, entre los tres candidatos (al Bronco ni siquiera lo tomo en cuenta), el que tiene la mayor preparación, el que tiene más experiencia, y el que representa la opción que puede llevar a México a mejores niveles de crecimiento y desarrollo.

Lo critican porque es el candidato del PRI, pero olvidan que trabajó, y lo hizo muy bien, en los dos sexenios en que nos gobernó el PAN.

Meade por supuesto no es priista, y tampoco fue panista cuando formó parte de los gobiernos de Fox y Calderón. Pero es un hombre muy inteligente, con una enorme preparación, con una gran trayectoria en el servicio público, y cuya honestidad no está en tela de juicio como si lo está la de AMLO y la de Anaya.

Por eso voy a votar por él. Porque es sin lugar a ninguna duda, la mejor opción para México. Respeto por supuesto las ideas y los argumentos de quienes piensan diferente. Pero, hombre por hombre, no hay punto de comparación.

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El Heraldo de Saltillo
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