IVAN NAJERA AGÜERO
Desde hace 25 o 35 años no hay un rector que haya estado en la Universidad Autónoma de Coahuila, esto acaba este mes. Salvador Hernández Vélez se convertirá en el decimotercer rector de la Universidad Autónoma de Coahuila desde que obtuvo su autonomía en 1973; el primero de ellos que es oriundo de La Laguna.
A nivel simbólico, el número 13 está asociado al arcano de la muerte. Cuando hablamos de la muerte en el terreno esotérico o espiritual nos referimos a ella como un cambio, no como un final. Desde nuestra perspectiva limitada tendemos a asociar la muerte como algo negativo, pero desde un punto de vista ilimitado y en la búsqueda del sentido de la vida, la muerte es sólo un camino hacia un estado superior.
Después de dos décadas de avanzar en línea recta, los universitarios percibimos de que hay un mundo allá afuera, dinámico, competitivo y desprovisto de líderes formados en las aulas universitarias, sensibles frente a la problemática social, transformadores de su entorno. Se avanza pero no a la velocidad con la que Coahuila, el mundo y las otras universidades se desplazan. Se valoran las transformaciones emprendidas durante los últimos veinte años, pero es momento de ser agentes activos en la redefinición de los objetivos y de la visión de la máxima casa de estudios.
Y esto es el verdadero significado del número trece: la muerte de algo y el nacimiento de otra cosa.
La comunidad universitaria no suele dar saltos al vacío. A lo largo de los últimos años optó por la estabilidad, el cambio gradual, alejarse de los años donde dentro de la universidad había una gran división por los diferentes grupos que buscaban el poder, lamentablemente, en algunas facultades aún existen maestros y alumnos que solo buscan dividir, sin importarles el daño que causan.
Salvador Hernández, acostumbrado a no improvisar y a escuchar con atención las inquietudes de los universitarios y de tener un gran apoyo en todas las escuelas y facultades, realizara una intensa campaña (como si estuviera abajo en las preferencias) de acercamiento con todos los universitarios en la UA de C.
El nuevo Rector tendrá que echar mano de todos esos instrumentos que lo han llevado a mantenerse vigente en la política, para hacer realidad el cambio ordenado que demandan los universitarios desde hace bastantes años.
Que llegara otro lagunero al gobierno de Coahuila, no significa que obtuviera alguna ventaja, tanto así, que les aseguro que con Miguel Riquelme o sin él, hubiera buscado la rectoría, porque lo saben bien sus conocidos, tiene el suficiente apoyo dentro de la UA de C y una gran propuesta para modernizar a la universidad. Dentro de su formación a lo largo de su vida, la adquirió en movimientos de la línea de masas en comunidades y grupos vulnerables, esa experiencia de compromiso solidario le dio una visión de que los universitarios debe realizar estrategias y acciones de extensión, para que con la participación comunitaria se encuentren soluciones duraderas a problemáticas concretas, como lo señala el Estatuto Universitario. Finalmente se sabe que Salvador Hernández Vélez es un hombre institucional, y un enamorado de su universidad, así que hará todo lo posible para realizar ese cambio que necesita la máxima casa de estudios en Coahuila.
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